Thirteen

31 enero, 20h.

Thirteen
EE.UU., 2003, 95 min., Color
Dirigida por Catherine Hardwicke
Interpretada por Evan Rachel Wood (Tracy), Nikki Reed (Evie Zamora), Holly Hunter (madre de Tracy), Jeremy Sisto (novio de Tracy)
Guión de Catherine Hardwicke y Nikki Reed
Música de Mark Mothersbaugh
Fotografía de Elliot Davis

Calificación: mayores de 18 años


ARGUMENTO:


Tracy es una adolescente en la problemática ciudad de Los Angeles. El ambiente que la rodea la empuja a hacerse mayor lo antes posible, exigiéndole responsabilidad y entereza en todo momento. Sin embargo, su nueva amiga Evie le va a mostrar un mundo diferente donde las drogas, el sexo y el materialismo están al alcance de su mano. Y no exigen nada de ella.


DATOS DE INTERÉS:

- Es la opera prima de Catherine Hardwicke, que hasta ahora había venido haciendo trabajos como diseñadora de producción en diversas películas. El guión es de la propia directora en colaboración con la debutante Nikki Reed, protagonista de la película cuyo padre es el director artístico Seth Reed (Minority report). Hardwicke, amiga de la familia, trabajó con Nikki recopilando sus experiencias de adolescente.

- Consiguió el premio a la mejor dirección en el Festival de Cine de Sundance 2003. Fue candidata a los Globos de Oro 2004 a la mejor actriz (Evan Rachel Wood) y mejor actriz de reparto (Holly Hunter). Consiguió el Independent Spirit Award 2004 al mejor debut interpretativo (Nikki Reed). Y Holly Hunter fue candidata al Oscar a la mejor actriz de reparto.

- Hay un "personaje" inmóvil que aparece en varias escenas de la película y va sufriendo una lenta transformación a lo largo de la misma: el cartel publicitario con el que se cruza Tracy varias veces. Al principio está totalmente nuevo, pero luego se va deteriorando progresivamente junto con la protagonista.

- Los colores de las imágenes varían durante la película. Son claros al principio, cuando Tracy es aún una niña corriente, se vuelven chillones conforme se desarrolla su caída y al final, cuando ha tocado fondo, se tornan apagados y bastante tristes.


SUGERENCIAS PARA EL DEBATE:


- La película retrata los dos espacios de relación socio-afectiva de los adolescentes: por un lado, la relación entre iguales y su delicado equilibrio a la hora de componer la autoestima, el autoconcepto y la identidad. Y por el otro, las difíciles relaciones con la familia, definidos en el caso de la película desde el perfil de un entorno permisivo y engañosamente comprensivo, y sin una figura paterna desde la que sentirse querida y segura.

- Observa el proceso de búsqueda de su propia identidad del personaje de Tracy a través de diferentes escenas que muestran vestimentas, miradas, detalles, diálogos que ilustran esa búsqueda.

- Observa el perfil de la madre de Tracy, su inseguridad, su necesidad de agradar a todos sin enfrentarse a los problemas, su miedo a fracasar, y cómo esa actitud influye sobre la autoestima de su hija.



- Lee el artículo Thirteen en 10 escenas. Quizá te sirva para reflexionar sobre algunos aspectos de la película que consideres de interés.


- Observa los cambios que se producen en Tracy a lo largo de la película (amigos, indumentaria, hábitos domésticos, relaciones con su familia, carácter, etc.) y cómo influyen en las decisiones que toma.

- Observa al personaje manipulador y destructivo de Evie. Sólo calma su dolor haciendo daño a otros. Busca una familia que no tiene, pero para que pague por el daño que la suya propia le hizo.



WEBS DE APOYO:

- Estilos educativos y conductas adictivas.
- Relación padres-hijo y desarrollo socioemocional.
- Padres permisivos: aprender a decir no a los hijos.
- Cine, educación sexual y valores.
- Artículo sobre la película.
- La asertividad (presentación).
- Decir "no" a las drogas.
- Educación para la salud en Primaria.
- Tutorías en 4ª ESO.
- Entrenamiento asertivo.
- ¿Qué es la asertividad? (presentación).
- Fichas de trabajo en el aula.
- Ficha sobre educar en la asertividad.
- Materiales CNICE.
- Más materiales CNICE.


OTRAS PELÍCULAS:
(que retratan el mundo de la adolescencia)

- Ghost World, Terry Zwigoff (2001)
-
El Club de los poetas muertos, P. Weir (1989)
- Barrio, F. León de Aranoa (1998)
- Diario de un rebelde, Scott Kalvert (1995)
-
Las mujeres de verdad tienen curvas, Patricia Cardoso (2002)
- Yo soy la Juani, Bigas Luna (2006)
- El indomable Will Hunting, Gus Van Sant (1997)


MATERIAL AUDIOVISUAL:

(se recomienda no ver los vídeos sin haber visto antes la película)





79 comentarios:

Unknown dijo...

Hola. En primer lugar, me parece muy interesante el tabajo que hacen en esta página. Estoy trabajando con esta película en mi centro (Tenerife)y tengo interés en el artículo que mencionan "Thirteen en 10 escenas" pero no lo encuentro. Me gustaría acceder a él. Enhorabuena por la selección de las películas.
Francisco
jarondo@gmail.es

Cine en las aulas: dijo...

Gracias por tu atención, Francisco. Nos ilusiona que te parezca útil y sugerente este blog.

Respecto al artículo "Thirteen en 10 escenas", aún no está publicado pero lo estará en breve. Mira de vez en cuando en la sección "Agenda" y allí podrás acceder a él.

Nos encantaría que nos enviases por email (edukacine@gmail.com) o desde el Foro una reseña de vuestras actividades con cine en las aulas de vuestro centro de Tenerife. Contarnos nuestras experiencias nos ayuda a mejorar y no sentirnos tan raros cuando algo sale o no.

Un saludo desde Extremadura y esperamos veros más a menudo por el blog. No dejéis de escribir vuestros comentarios.

Anónimo dijo...

después de las advertencias antes de la proyección, he de confesar que me imaginaba una película mucho más dura, no tanto en los contenidos como en las formas. Pero no con esto quiero decir que me haya resultado decepcionante. Todo lo contrario, porque la he disfrutado bastante, he podido ver muchos mensajes claramente.
Una de las cosas que más me ha llamado la atención es cómo se van invirtiendo los papeles de las dos chicas a lo largo de toda la película (me he acordado de la "quijotización" y "sanchonización" en la obra de cervantes, guardando las distancias). La amiga va cambiando sus maneras, volviéndose una joven más serena y "cariñosa" (especialmente en la última escena), mientras la protagonista comienza siendo una chica sana, sencilla y más tranquila... y va tomando el aspecto de su amiga, volviéndose más fría, materialista. El problema es que esta segunda lo hace sin control, y se le escapa de las manos. Como al resto de la familia, todos miembros desubicados sin un papel tan dominante y manipulador como la amiga, que es la única que controla la situación en todo momento.
Me llama la atención también la poca fuerza de la madre, que hasta cierto punto se ve también arrastrada por la amiga, y tiene pequeños comportamientos de adolescente: se viste como ellas cuando van al cine, pareciendo una más, por ejemplo.
En el momento que la madre dice "no", la única vez que se niega a que la amiga se quede con ellos, toda la cadena destructiva de su hija se rompe, la amiga se va, se descubre todo... para intentar volver a la calma.

Esto es lo que más me ha llamado la atención, aunque esta película da muchas ideas para comentar, sí.
un saludo,
elena torres bautista

Anónimo dijo...

Película difícil de seguir.El hilo argumentativo es algo caótico.Me dio la sensación de que en el montaje de las escenas habían perdido el guión:voy al instituto, ahora estoy con mi madre,luego salgo...no me resultó que hubiese ningún hilo conductor.
También difícil de ver por las escenas duras.Me fijé en la sala y había quien se tapaba la cara para no verlas.
Por último apuntar qué tiene que pasar por la cabeza de una adolescente para autolesionarse.Distintos tipos de autolesiones:drogas, alcohol,lesiones en el brazo...Sé que esto último es una enfermedad diagnosticada,pero esto no me ayuda a comprenderla.
En definitiva considero que ha sido hasta el momento la que menos me ha gustado.
Saludos,Lola Molina.

Anónimo dijo...

La historia cuenta la transformación que vive Tracy (Evan Rachel Wood), quien empieza la película como una gran estudiante que juega con muñecas. Pero es testigo del que posee Evie Zamora (Nikki Reed), popular, guapísima y “cool”, Evie representa todo lo que de repente Tracy quiere y necesita ser. Al principio Tracy no tiene ninguna esperanza de ser aceptada en la elitista pandilla de Evie. pero Tracy aprende a rehacerse a sí misma, hasta convertirse en el ideal definitivo de una adolescente. Descubre cómo maquillarse, qué ponerse, cómo llevar el pelo, cómo moverse. Averigua las claves de la popularidad, Evie se convierte en su mejor amiga e incluso comienza a llamar la atención de los chicos. Cuanto más se adentra en su prematura etapa adulta, más alto se pone el listón. Pierde la intimidad que tuvo con su madre (Holly Hunter), empieza a hacer novillos y, a pesar del odio atroz que siente hacia el novio de su madre, un antiguo drogadicto llamado Brady, empieza a abusar ella también de las drogas. Tracy tiene trece años y vive un torbellino de emociones en el que todo lo que hace, todo lo que dice, todo lo que quiere, parece ser lo más importante del mundo.
Tecnicamente es una película bastante sencilla. Cabría resaltar que gran parte del film está rodado con planos en primera persona que le dan una dosis extra de realismo y el color y la luz que se van volviendo más oscuros a medida que Tracy avanza en su proceso de autodestrucción para terminar en un plano final muy moña en el que vuelve el color, termina la pesadilla, todos felices, comiendo perdices...
Mi humilde opinión es que la película no tiene fluidez narrativa y además el tema está tratado de una forma tan exagerada que pierde verosimilitud.
En cuanto al aspecto puramente educativo: Nada que no sepamos ya. El mejor alumno del mundo puede ser destruído en cuestión de días por una mala compañía, pero ... y lo bien que se lo van a pasar.

Anónimo dijo...

Película de niña buena que deja de ser tan buena. En referencia a comentarios anteriores, a mí no me ha parecido que se fueran invirtiendo los papeles de las chicas, más bien lo he interpretado como que Evie (la morena) realiza un papel delante de la madre de la otra chica para ser aceptada por ella, ya que una vez dentro del núcleo familiar es más fácil manipular.

Sobre lo que tiene que pasar por la cabeza de un adolescente para tomar diferentes drogas, alcohol, etc. no es tan difícil de adivinar: es la forma más rápida de entrar en el grupo de la “gente que mola”. Si vistes de determinada forma, vas con chicos, bebes,... molas; si haces los deberes, pagas todo lo que compras, vistes como una niña (que es lo que eres con 13 años),... no molas; solo hay que ver como se ríen de ella al principio por sus calcetines o como las amigas que tiene al principio de la película no son aceptadas por el grupo. Lo malo de esto es que me parece que cada día se da más esa forma de “molar” en los centros educativos españoles. El chico que se fuma un porro ya no es mirado de forma rara por los adolescentes, sino que se considera como lo más normal del mundo.

No sé si es porque la película trata los temas en muy diferentes contextos y no profundiza en ninguno, pero me ha llamado la atención que los profesores no dieran ninguna voz de alarma. Una chica que es buena en los estudios, se involucra, etc. y cambia radicalmente, tanto en aspecto como en costumbres y responsabilidades. ¿Los profesores no se fijaban o simplemente pasaron de la chica? Solo le dicen que llame a su madre cuando ya han decidido que repite curso, ¡bien por ellos!

Y lo mejor de todo: el padre. Eso de llegar y decir “yo hablo con ella (diez minutos, no más) y todo arreglado” no tiene precio...

Saludos, Victoria Cejudo García

Anónimo dijo...

La película aborda uno de esos casos que de vez en cuando nos encontramos en las aulas: el del alumno aplicado, inteligente, respetuoso, que siempre ha sacado buenas notas, que a veces roza la brillantez y que de pronto, sin que parezca haber ocurrido nada en especial que lo justifique, se transforma en un cero a la izquierda en todos los sentidos: deja de estudiar, se vuelve irritable y agresivo, se rodea de compañías poco recomendables y se mete de cabeza en un mundo hedonista, alocado, a veces autodestructivo, que refleja a la perfección el enorme desprecio que siente por la educación recibida hasta ese momento.
Es sorprendente esa transformación de Dr. Jeckill en Mr. Hyde, pero nuestras explicaciones acerca del porqué de esos cambios drásticos suelen ser ingenuas y simplificadoras en extremo: “es la edad” (esta es la más recurrente); “es una mala racha”; “son las hormonas que le han trastornado”, “esas compañías le han llevado por el mal camino”… No hay que despreciar estas explicaciones, pues algo de verdad tienen, pero es más que evidente que son explicaciones encaminadas a justificar un fracaso educativo, a exculpar una labor errónea de los padres (los principales responsables) o de nosotros, los profesores. Cuando el niño es un modelo de comportamiento los padres no dudan ni por un instante en adjudicarse los méritos de su conducta, pero cuando ese mismo niño empieza a comportarse como un ser despreciable tratan de echar balones fuera y atribuir las causas de su nueva conducta a elementos externos al entorno familiar.
La protagonista de Thirteen, Tracy, es una niña de 13 años que ya no es una niña, que ha vivido la ruptura de sus padres, la relación enfermiza de su madre con un drogadicto, que ha tenido que madurar rápidamente para sostener a su madre, una mujer de buen corazón, inteligente, pero débil e infantil, incapaz de decir “no” a nadie. Tracy es una adulta en muchos sentidos, pero se aferra todavía a sus osos de peluche como refugio ante una situación desconcertante: su madre es una niña-adolescente como ella, y a menudo es ella la que hace de madre de su propia madre, pues tiene que reñirla continuamente por la manera desastrosa en que lleva su negocio o su vida amorosa, por romper sus promesas… y además tiene que cuidar niños para que su madre salga a divertirse. Hay un claro intercambio de roles madre-hija que tiene consecuencias catastróficas para Tracy: es ella la que tiene que amar, proteger y educar a su madre, mientras que ésta olvida sus obligaciones maternas. Y ello aunque aparentemente existe un diálogo entre ambas, una comunicación fluida, e incluso la imposición habitual de normas y obligaciones de una madre hacia su hija. Pero es una fachada. En el poema que se lee al principio de la película, Tracy le está echando precisamente en cara a su madre su ceguera, sus continuas mentiras y la acusa de haberla dejado lisiada (anímicamente, se entiende). Tracy tiene sólo 13 años y no sabe en realidad lo que está queriendo decir con su poema, sólo intuye que algo la está corroyendo por dentro y que su madre es la causante de ello. “No es nada fácil, es un asunto que cuesta explicar”, dice el poema.
Su madre le dice que es un poema muy duro y que ya lo comentarán por la noche. Pero no lo llegan a comentar. La madre de Tracy siempre está diciendo “ya hablaremos”, pero nunca hablan seriamente. La comunicación que hay entre ambas está mediada por un poema que ninguna de las dos quiere entender, por lo doloroso que resultaría entenderlo.
La relación deformada de Tracy con su madre es un peso insoportable, demasiado grande para alguien de 13 años. La falta de amor provoca que su refugio infantil se resquebraje y se vea forzada a convertirse definitivamente en adulta. Pero, precisamente, por sus carencias afectivas, se producirá una paradoja: pasará de ser una niña muy adulta a una adulta muy niña, igual que lo es su madre. Quiere simplemente amor, quiere ser querida, y las estrategias para buscarlo son en el fondo de lo más infantiles: quizás ser admirada sea ser querida (de ahí su ansia por ser popular), quizás llenar bolsas con ropa y zapatos llene mi vacío emocional, quizás enrollarse con un chico sea ser querida (de ahí sus coqueteos con el sexo), quizás si me hago heridas alguien vendrá a curármelas y me querrá (de ahí sus autolesiones, su falta de miedo a las agujas o el intercambio de puñetazos con su “amiga”), quizás si dejo de estudiar alguien se preocupará por mí, quizás si no como alguien se dará cuenta de que tengo hambre de amor, quizás al drogarme no necesite ser querida… Su madre también busca el amor de manera insensata en un drogadicto, en alguien que la va a abandonar a las primeras de cambio, así que es lógico que la hija haga algo parecido.
Toda esta vorágine de despropósitos culmina por fin al alcanzar el objetivo perseguido: que su madre sea consciente del mal que ha hecho. Tracy ha escondido tantas drogas por su habitación y en tantos lugares que es evidente su deseo de ser descubierta, de que su madre se percate de una vez de que necesita ayuda. El contenido del poema queda desvelado: “No me quieres”, le dice a su madre sin atreverse a mirarla a los ojos. Es una frase nada sencilla de pronunciar, pues esconde un dolor intolerable, tanto que Tracy ha preferido estar cerca de la muerte antes que pronunciarla. La madre de Tracy percibe de pronto dónde está el mal de su hija, en la falta de cariño. En una escena conmovedora la vemos forcejeando con su hija, luchando con ella para acariciarla y besarla. Tiene que amarla a la fuerza, pues es la única manera de que Tracy confíe de verdad en el amor de su madre. La última escena, la de Tracy disfrutando en un columpio, nos deja claro que la protagonista vuelve a ser una niña, pero una niña feliz, que es lo que le corresponde por su edad. El libro sagrado de las mentiras se cierra.
Por cierto, pienso que la película es demasiado confusa y no me ha gustado.
Diego Calleja

María José dijo...

Hasta el momento me ha parecido la película más floja del ciclo. Me resulta bastante exagerada, en su planteamiento. Tracy en 4 meses se convierte en politoxicómana, anoréxica, mangante, se auto lesiona y se convierte en la mas "popular" (para continuar con la jerga americana) del instituto. Evie, demasiado perversa ¿no?, con 13 años camella, manipuladora, maltratada, ninfómana, sin familia, con una tutora que no se interesa en absoluto por ella, que a su vez tiene problemas de autoestima, de alcohol y no se de cuántas cosas más.
Todas las casas que aparecen son caóticas, todos necesitan terapias de uno u otro tipo, desde la madre al novio ex toxicómano, a la tutora de Evie, a las amigas de la madre, a todos los que entran o salen de esa casa siempre llena de gente. Parece que los únicos "cuerdos" son los profesores del instituto (por una vez, no aparecemos muy mal que digamos). En fin, que no me lo he creido, que no.
Un saludo,
Pepa Ruiz Casillas

M.Carmen García dijo...

Me ha impresionado mucho ver claramente cómo el estilo educativo permisivo dificulta la comunicación entre los miembros de la familia y el no tener normas claras confunde al adolescente en lugar de ayudarlo.
También otro tema muy interesante que se aborda en la película es la escala de valores: la importancia de la imagen, la belleza y la moda por encima de todo (Impactante la escena en que la madre adoptiva de Evie se había operado)
Por otro lado, la conveniencia de trabajar en clase las habilidades sociales como la autoestima, la asertividad,... para prevenir todo este tipo de conductas.

El comienzo de la película no te deja indiferente, al ir hacia atrás en el tiempo, empiezan a verse las cosas algo más claras.

Escena 1: El poema que lee Tracy a su madre es impactante y en ese momento es cuando la madre se da cuenta de que hablan lenguajes diferentes. Sin embargo, la madre siempre está presente, en todo momento, no como el padre ausente.

Escena 2: Tracy empieza a despegar: le horrorizan los peluches que hace poco le gustaban. Su madre también está ahí colaborando con su hija, comportándose como ella. Me llama la atención la forma de pago de la ropa nueva que adquieren.

Escena 3: Se pone de manifiesto la consabida retahila de la importancia de los amigos y la influencia de las "malas" compañías. Tracy se fascina por la seguridad de Evie, su forma de vestir, de comportarse,...ve en ella lo que a ella le falta.
Se distancia de sus amigas de siempre y les miente para llegar corriendo a casa a llamar a Evie.
Empieza a cambiar sus costumbres. Empieza a fumar...Imita el estilo del líder popular.

Escena 4: Continúa la ruptura en la relación madre-hija. El novio de la madre intenta relativizar la situación. Tracy recuerda los malos momentos pasados (el colocarse no le ayuda a olvidar el pasado, sino que le lleva a revivirlos)

Escena 5: Poco a poco Evie le va robando terreno a Tracy y además disfruta haciéndolo, es como si le estuviera robando su madre, su casa,...su espacio. Tracy aparece malhumorada y poco colaboradora.

Escena 6: Tracy se siente sola, manipulada,...cada vez peor. Sólo encuentra satisfacción en autolesionarse.

Escena 7: El hermano descubre a Tracy hecha polvo, cada vez está peor. No llega a contárselo a su madre. Tracy discute con ella por el tema de la comida. La madre se siente una esclava.

Escena 8: Aparece el padre que no quiere ver la situación, no quiere ver el problema. Es más cómodo estar al margen que tragarse todo el marrón. El hijo se siente impotente solicitando del padre una ayuda que no recibe.

Escena 9: Tracy también tiene problemas en clase: no se entera de que hay que entregar un trabajo, se enfrenta a sus antiguas amigas, miente al profesor,...bueno, entra en una dinámica de lo más peligrosa. Cada vez está todo más negro y ella misma no se reconoce frente al espejo.

Escena 10: La escena final es verdaderamente escalofriante. Evie ha estado aprovechándose de Tracy y de su familia.
Tracy está hecha polvo y su madre la acompaña, aunque no quiere que la abrace ella lo hace y consigue calmarla.
La película termina con Tracy ya en color, gritando y riendo...final feliz.

M.Carmen García Romero

Anónimo dijo...

Por los comentarios que aparecen creo que el argumento está bastante comentado, así que quiero hacer un comentario breve.
Salí de la sala de proyección de manera distinta a la que entré. La película me impactó; ví la realidad de gran parte de la juventud actual de una manera concentrada, o exagerada, en aspectos negativos, pero reales. En el colegio observo la falta de autonomía del alumnado, da la impresión de que cada vez "saben más" pero al mismo tiempo son más inútiles, más dependientes, sin criterio propio ni opiniones lógicas. Utilizan las opiniones que oyen por la tv.
O sean posibles víctimas de chantaje y de manipulaciones. Siempre se ha dicho que la adolescencia es un momento propicio para lo dicho, pero ahora falta, muchas veces, la firmeza de los padres y también del profesorado.
El rítmo un poco caótico de la película creo que ayuda a crear el clima emocional que muestra.
La película me ha gustado y la considero interesante que la proyectasen en los institutos a los padres, les ayudaría a ser conscientes de algunas cosas de sus hijos, y ya se sabe que una imagen vale más que mil palabras.
Fina Cortés Arias

Anónimo dijo...

Esta película nos presenta la vida de tracy, adolescente y buena estudiante que debido a su desestructuración familiar (ausencia de un referente paterno)y al estilo educativo permisivo de la madre, sufre una baja autoestima y un imparable deseo de ser popular, de sentirse querida y admirada por todos cuantos la rodean. Para ello, hace todo lo posible por parecer mayor: cambia su forma de vestir,de peinarse, fuma, bebe, se droga, roba,... incluso llega a autolesionarse.

Esta nueva Tracy le permitirá formar parte de la pandilla que encabeza Evie, una joven manipuladora muy popular en el instituto que ejercerá una influencia absoluta sobre ella y su familia hasta el punto de llegar a plantear su adopción en la familia.
La relación madre-hija se endurece. La madre es incapaz de controlar a su hija y sus propios miedos y su inmadurez la impiden hacer frente a la situación. La hija cada vez la trata peor, la insulta,la grita y en ocasiones la ignora.

A medida que avanza la autodestrucción de Tracy en busca de emociones nuevas,los tonos de la película se oscurecen y se apagan.
Sin embargo se augura un final feliz cuando de nuevo aparecen los colores alegres.

Me llama la atención la indiferencia de los profesores ante el cambio tan radical que experienta Tracy. Este aspecto no aparece tratado en la película, quizás porque como bien se comentó antes de verla, está pensada para un tipo de educadores :los padres.
Personalmente es la que menos me ha gustado.

Dulce Mª Pardo.

Anónimo dijo...

La película me resultó dura pero me gustó. Creo que refleja muchas actitudes y comportamientos que en mayor o menor medida muestran los adolescentes y permite darse cuenta de ciertas actitudes perjudiciales para ellos: sobreprotección, permisividad, falta de implicación en su educación...
También me ha llamado la atención, como ya se ha dicho en comentarios anteriores, el hecho de que el profesorado parece estar al margen de toda esta situación, cuando realmente esto no es así y creo que los profesores podían haber tomado parte en esta situación tan extrema.
Sinceramente, me ha parecido una película dura pero buena.
Saludos
María José Prudencio Pérez

Anónimo dijo...

Aunque la historia que nos muestra la película es desgarradora, y nos puede parecer irreal, lo cierto es que la realidad siempre supera a la ficción. La influencia del entorno en un adolescente es vital, sobre todo si el adolescente se encuentra rodeado de inseguridades, sin modelos fiables en que mirarse y si la autoestima la tiene por los suelos. Busca entre sus iguales lo que no tiene en su casa : le falta el apoyo de la figura paterna y la madre es incapaz de conducir su familia pues cae continuamente en contradicciones e inseguridades. Es posible que un adolescente caiga en una vorágine de destrucción si se dan los condicionantes adecuados. Por desgracia, la escuela o el instituto no siempre pueden compensar los problemas familiares, bien porque no se detecten bien o bien porque puede más el entorno familiar o el de los amigos.A pesar de su dureza, el final de la película queda abierta una puerta a la esperanza. Excelente película para padres. Por último una reflexión: los amigos pueden ser un tesoro o una perdición.Eustaquio Morgado Corchado.

Anónimo dijo...

Hola,la verdad es que llevamos tres películas muy diferentes unas de otras,aunque todas muy interesantes.
Ésta en concreto me parece demasiado exagerada,muy americana,pero de la que se puede hacer una lectura sobre el comportamiento de un adolescente.
Me sorprende bastante cómo la madre de Tracy no se da cuenta de todos los cambios que experimenta su hija,que no se plantee porqué la niña cambia radicalmente de amigas,que llegue borracha y no le diga nada ni sepa cómo actuar.
Quizá la excesiva confianza depositada en una niña de 13 años,además de una familia desectructurada son algunas de las causas del comportamiento de Tracy.
Como ya han comentado,yo también he percibido ese cambio de papeles entre Tracy y Evie.Ésta última parece falta de cariño y afecto y en mi opinión es como si intentara suplantar a su amiga.
En conclusión,una película para hacernos reflexionar sobre la difícil etapa que es la adolescencia y los peligros que acechan en ese difícil mundo en el que lo más importante es ser aceptado,aunque el precio que haya que pagar sea alto.
Éstos son aspectos que no pueden obviar ni los padres ni por supuesto nosotros los profesores.
Concepción Teresa Sierra Martínez

Anónimo dijo...

Ante todo, de nuevo como muchos de mis compañeros de curso y de fuera, felicidades a los dos coordinadores por este ciclo de cine.
Dicho lo anterior, he de decir que la verdad es que no ha sido de las mejores películas que he visto, no sólo por lo acelerado o rápido de la puesta en escena o por la temática que plantea, sino porque creo que este tipo de películas no son de aquellas que más disfruto viendo.
En otras películas he intentado esmerarme o comentarlas con interés o al menos con el deseo de aportar algo a los comentarios, pero en ésta me es dificil.
¿Las razones?
Hay ciertos temas que no soporto porque para mí van contra natura...y uno de ellos es ver cómo una adolescente anoréxica se mete de todo e intenta ser mayor o comprarse cosillas robando y vendiendo droga. Se me revuelve el estómago... No es para mí.Que se dediquen a estudiar y no a hacer cosas insalubres (por ser políticamente correcto). Y encima acaba la película con un abrazo de la madre, como que ella ha hecho algo mal, entre otras cosas...
Yo enseño mi asignatura y también algo de educación...pero no soy quién para juzgar o analizar algunas cosas que no soporto.
Y si no, pues a ver Física o Química.
En fin.
José Muñiz

Julia Timón dijo...

Es dificil para un preadolescente adaptarse al ambiente que le rodea. Hay demasiadas cosas que no entiende y que desconoce. Realmente los chicos salen al mundo demasiado rápido y con poca preparación, esto último consecuencia de aquello. Como siempre en este tipo de peliculas los padres están separados. No creo que sea absolutamente necesario este evento para que la hija comience su autodestrucción; pero es verdad que la madre sola puede perder la perspectiva de lo que le ocurre a su hija. El padre se dibuja como un verdadero ausente, con la peor de las ausencias, estar y no estar: "no me importas" parece decir con sus continuas excusas. Creo que hay que prestar mucha atención a la actitud de la madre: concuerda mucho con los casos que conozco de mi experiencia como tutora. Padres que no quieren creer aunque su intuición les avisa de que algo muy malo está pasando, padres que lo asumen como época de normal reveldía, padres que no se atreven a meterse de lleno a hablar con los hijos, padres, en fin desorientados. Pero esta desorientación tiene muchas veces su oriegen en la falta de valores y principios en los propios padres. Todo lo anterior podría tb decirse de los profesores. El resultado puede leerse en cualquier estadistica: cada vez es mayor el consumo de drogas entre nuestros jóvenes e incluso se algunas, y no solo las legales, son bien vistas por gran paarte de la sociedad.Y podría seguir hablando de forma generalista sobre el tema mucho más, pero tb, como muchos de mis compañeros educadores y/o padres sobre imnumerables casos concretos de vidas echadas a perder antes de comenzr, como el caso de nuestra protagonista. ¿El final? Al menos la madre es capaz de decir no. Aun así, ¿cómo ahora vamos a desocupar las butacas que ya han sido ocupadas? Mejor es ocuparlas primeros con valores a tener que desocuparlas de basura. Ni siquierea el guionista se atreve a poner un final feliz. Nos lo deja a nosotros: ¿hay esperanza? Mi conclusión es: no miremos hacia otro lado nunca, los ojos siempre bien abiertos para nuestros adolescentes, pues no lo tienen facil.

Anónimo dijo...

No me ha gustado la película, quiero decir que no me ha gustado lo que he visto en la película.
Desde el punto de vista cinematográfico me ha gustado mucho el ritmo, la naturalidad de la interpretación de los personajes y el filtro que modifica el color según avanza el drama.
La película es muy dura.Retrata muy bien esas "lolitas" que deambulan mayoritariamente por EEUU y parte de Europa. Niñas que quieren vivir como si fueran mayores y, claro, su madurez psicológica no va acorde con esos usos.Niñas víctimas de una sociedad de consumo donde otros ganan, desatendidas por sus progenitores o atendidas de manera equivocada.
Me llama la atención especialmente la escasa capacidad de los protagonistas (madre, padre e hija) para ver el inicio de un gran problema.
En la relación madre-hija parece que no hay nigún nexo afectivo que evite el desastre, ningún hilo para agarrarse, parece desmesurado.Al final la niña parece fuerte... no me encaja.
Firma: Maria Teresa Claver Romero

Anónimo dijo...

Cuando terminé de ver la película me quedé pensando, pues este año doy clase a jóvenes que no distan mucho de la edad de las protagonistas, y me daría mucha pena que tomaran un camino equivocado a la hora de enfocar sus vidas.
Todos sabemos que la adolescencia es un perido de la vida muy traumático, que requiere de mucho sentido común para poder pasarlo y vivirlo adecuadamente, pues a estas edades, los jóvenes viven entre constantes indecisiones y cambios, sobre todo de amigos, que les lleva a no saber bien cómo desenvolverse.
Me parece una película bastante dramática, aunque de todas formas, podría ser una buena manera de hacer ver a alumnos especialmente de secundaria, algunos de los peligros que les depara la vida.

Pilar Cayero Lebrijo

Anónimo dijo...

la película me ha gustado pero no tanto como las anteriores.Es un claro ejemplo de lo sensibles y manipulables que pueden ser determinados adolescentes,que aparte de los problemas que ya de por si suele tener suele tener dicha etapa,se le añaden determinadas "problemáticas familiares".
Desde el punto de vista escolar el tema quizás este tratado de una forma un tanto inverosimil,los profesores no dan "voz de alarma"ante una alumna que ha sufrido un cambio tan radical hasta que no hay salida para Tracy.
Pienso que la verdadera culpable de toda la situación es la madre,la poca fuerza que trasmite es en muchas ocasiones un calco del comportamiento de su hija,dejándose arrastrar por su amiga adulta presentando comportamientos totalmente inmaduros,adolescentes...
Todo ello provoca que la situación empeore,pierde el control o quizás nunca lo tuvo,dicho control lo adquiere la amiga de su hija,"es la única que tiene claro lo que quiere".

MªSoledad Bueno Sánchez

Anónimo dijo...

La inmersión en la adolesdencia que nos narra la película está llena de tópicos. Si todos los problemas de identidad que se tienen en la adolescencia se resolvieran de este modo, sería imposible vivir en sociedad;esto sería un estado de guerra de todos contra todos (Hobbes).
De todas formas la película trata problemas que están a la "a la orden del día" en nuestra sociedad: la educación(tanto en el ámbito familiar como educacional), la destrucción y minusvaloración de la familia como institución básica, el mal uso de la libertad en los adolescentes, la permisividad excesiva en todos los ámbitos de la sociedad, las drogas, el sexo...
Todos estos temas (hiperbolizados en la película) nos tienen que hacer reflexionar como padres, educadores, pero sobre todo como miembros activos de la sociedad em que vivimos.
Esa libertad que tanto ansiamos ¿es equivalente a todo vale?
¿No ha llegado el momento de cambiar el sistema educativo a la vista de los resultados?
¿No deberíamos fomentar la institución familiar como "grupo socializador" base de todo desarrollo personal?
En fín esta película, de nuevo, me ha reforzado la idea, que como persona, educadora y madre, de que muchos de nuestros jóvenes (más de los que desearíamos) desconocen lo que es el esfuerzo, la solidaridad, no les importa el ser sólo el tener,,,¿qué está fallando?.Si esta película vale para que todos nosotros, educadores,aportemos ideas en este cambio tan necesario: " Bienvenida señorita Tracy".

Anónimo dijo...

La inmersión en la adolesdencia que nos narra la película está llena de tópicos. Si todos los problemas de identidad que se tienen en la adolescencia se resolvieran de este modo, sería imposible vivir en sociedad;esto sería un estado de guerra de todos contra todos (Hobbes).
De todas formas la película trata problemas que están a la "a la orden del día" en nuestra sociedad: la educación(tanto en el ámbito familiar como educacional), la destrucción y minusvaloración de la familia como institución básica, el mal uso de la libertad en los adolescentes, la permisividad excesiva en todos los ámbitos de la sociedad, las drogas, el sexo...
Todos estos temas (hiperbolizados en la película) nos tienen que hacer reflexionar como padres, educadores, pero sobre todo como miembros activos de la sociedad em que vivimos.
Esa libertad que tanto ansiamos ¿es equivalente a todo vale?
¿No ha llegado el momento de cambiar el sistema educativo a la vista de los resultados?
¿No deberíamos fomentar la institución familiar como "grupo socializador" base de todo desarrollo personal?
En fín esta película, de nuevo, me ha reforzado la idea, que como persona, educadora y madre, de que muchos de nuestros jóvenes (más de los que desearíamos) desconocen lo que es el esfuerzo, la solidaridad, no les importa el ser sólo el tener,,,¿qué está fallando?.Si esta película vale para que todos nosotros, educadores,aportemos ideas en este cambio tan necesario: " Bienvenida señorita Tracy".

saludos: Piedad Jiménez Rivera.

hablador dijo...

PELÍCULA TERCERA: “THIRTEEN”

Tracy, el personaje principal, es una caricatura del tipo de chica víctima de la sociedad que le rodea en el entorno de una gran ciudad. La mayor influencia para el cambio que se va aproducir en la adolescente, más que la familia, es la calle. Fuera del hogar se encuentra todo lo perjudicial, incluida la nueva amiga.

En otro ambiente, como el rural, esas conductas quizás no se hubieran producido. Pero siempre existe un componente nato en la persona que la hace capaz de llegar a esa situación de robos, drogas, malos modales... ¿Quién no ha visto algún antiguo alumno pidiendo para droga en la calle porque sus padres tuvieron que echarle de casa?...

Creo que no debemos culpar a la madre. En todo caso, al padre, por desentenderse del necesario afecto y los problemas de su hija adolescente.

Tracy necesita identificarse como moderna y admirada por todos. Sus continuas miradas al poster de la chica atractiva nos lo ponen claro.

Para desgracia, elige como amiga a otra de su edad a quien intenta imitar... Ahí empieza todo.

La mala influencia de la falsa amiga sí es motivo para pedir responsabilidad a la madre. Las mujeres suelen tener un sentido especial para percibir el daño que hacen ciertas amigas en sus hijos/as. No obstante, también es traicionada por su propia hija, en quien puso toda su confianza al producirse el divorcio.

Nos enseña “Thirteen” que en la educación de adolescentes nunca debemos bajar la guardia. Ellas/os están siempre buscando un hueco para experimentar las sensaciones de la vida en libertinaje.

La libertad la ponen fácil las leyes “protectoras de los derechos humanos”.

La vida les enseñará a los adolescentes libertinos... Entonces será tarde. “Al despertar “, como dijo Calderón de la Barca. En nuestra película parece haber cogido a tiempo a la Protagonista.

El problema viene de no educarlos para la libertad.

Educar es como hacerles ver señales avisando de lo que va a suceder en diversas situaciones de su vida a corto plazo.

Debemos educar a los padres y madres para que sepan ser “padres/madres-para todo” de sus hijos.

Fdo./ Antonio Trenado Ojeda.

Anónimo dijo...

No se muy bien como realizar este comentario porque una semana después de la proyección de la pelíucla aún me sigo impresionando por algunas escenas cuando las recuerdo.

Lo más fuerte de la película es que aunque todo lo que alli nos narran son situaciones que les pueden suceder a cualquiera de nuestros alumnos o en las que puede estar involucrados, el ver que todo le sucede a la misma persona y aunque sea en una película, finalmente me sobrepasa.

Lo único que espero es no encontrarme con una situación así en la vida real.

Rosalía Benítez

Anónimo dijo...

Podría describir la película con muchos apelativos: cruel, dura, cruda..., pero eso sí, muy intensa.
Tal vez esta película nos puede hacer recordar la realidad por la que pasan muchos adolescentes de esas edades, a los que se les mezclan los problemas familiares con la necesidad de hacerse popular entre sus amigos, lo cual les lleva a hacer locuras de las que no se sabe si la vida les dará tiempo para arrepentirse.
Opino que es una película muy recomendable a todos los jóvenes, para lo que quizá no estaría de más que la vieran acompañados de sus padres; sería un buen motivo de reflexión y una manera más de que los padres conozcan los entornos en los que pueden desenvolverse sus hijos.

Blanca Cayero Lebrijo

Anónimo dijo...

La película presenta la adolescencia como una etapa de cambios tanto físicos como psíquicos, creo que algo extremado en tiempo y forma, para mi gusto. Los niños/as de esta etapa están disconformes con sus cuerpos y también se rebelan contra todo lo que no es de su agrado. Estos niños necesitan el papel de padre/profesor para afrontar los problemas de esta epata de su vida. La película relata que aunque nuestros adolescentes parezcan mayores, exteriormente, para su edad, la realidad es muy distinta, pues se trata de jóvenes demasiado protegidos que no saben resolver las dificultades por sí solos.
Me parece una película interesante para que la vean en los institutos alumnos y padres.

Saludos
Pilar Cerro Ledo

Anónimo dijo...

Esta película es especialmente dura con los personajes femeninos.Es cierto que la pelicula es vista a traves de los ojos de Tracy y por consiguiente refleja su punto de vista,aun asi se ve que las mujeres tanto las adolescentes como sus madres son seres infelices, no se sienten completos y necesitan tapar estas carencias con impulsos equivocados y destructivos para ellos mismos y los demas.Esto hace que me pregunto si existe cierta predisposión para el desastre por parte de ciertas personas y que esto no tiene ,en realidad, nada que ver con su situación familiar o su tipo de educación puesto que el hijo,que tambien ha sufrido,digamos,las mismas circunstancias familiares y el mismo tipo permisivo de educación,parece,sin embargo alguien maduro y que tiene una personalidad solida y sin fisuras.Helena Grajera Jariego

Anónimo dijo...

Efectivamente es una película muy dura, realmente impactante. Puede que estas cosas se den en la vida real, pero me cuesta aceptarlo. Me cuesta creer que haya adolescentes tal y como nos los presentan en esta película. La sobreprotección de la madre es totalmente nefasta.

Antonio Vivar Muñoz

Anónimo dijo...

La película nos presenta el lado tópico de la adolescencia que se recogía ya en las novelas juveniles de los ochenta con aires distintos a los que ahora son actualidad: anorexia, bulimia, interés por las marcas, por ir a la moda, por parecerse a...
También, cómo no, pone la mano enterita, no sólo un dedo, en el problema de la desestructuración familiar como telón de fondo de situaciones negativas para los hijos, abandonados a la influencia de las malas compañías.
Y, finalm,ente, acaba todo de color pink.
Ya habréis notado que me encantó Thirteen.

Carmen Folgado Fernández

Anónimo dijo...

Esta película retrata de manera descarnada una realidad que dista mucho de ser extraña o exagerada.
Lo primero que se observa es que la niña víctima de la situación posterior carece de una estructura familiar sólida, y esa circunstancia la hace débil.
Su madre la quiere mucho, pero no tiene equilibrio emocional, y tiene que acudir con frecuencia a reuniones de autoayuda.
El padre está ausente de la vida de la niña, y eso le afecta mucho.
Busca desesperadamente un modelo y cuando lo encuentra, se entrega del todo a él.
A partir de entonces asistimos a la fragilidad de la vida de la adolescente y sentimos pena y temor,porque como dige al empezar, esta situación no la apreciamos como lejana a nuestros hijos y alumnos, sino como una posibiliadad cierta.
Se pone de manifiesto de una manera clara que la educación en su sentido más amplio, en la familia y en la escuela, es el mejor escudo con el que podemos dotar a nuestros jóvenes para defenderse en la batalla que a todos les toca vivir.
También transmite el mensaje de la fuerza del amor, representada en ese final, en el que la madre se libera de todas sus ataduras para "fundirse" con su hija y librarla de la soledad y el miedo.

MªPaz Pérez Rodríguez

Anónimo dijo...

En Thirteen da la sensación de que el mundo que construimos los adultos, a la vez deslumbra y no les gusta a los jóvenes que dentro de muy poco serán adultos y continuarán su construcción -aunque sea tratando de destruirlo o destruyéndose, y, después, tampoco les gustará a los "nuevos" jóvenes, y así sucesivamente.
Los sustitutos emocionales de los padres o tutores elegidos por los niños, no siempre encajan con las características morales de aquéllos, incluso podrían engullirlos porque las convicciones que los referentes adultos aparentamos a duras penas cada día, a menudo no son fáciles de sostener ni siquiera delante de los niños.
Formar parte de un grupo, asociarte con alguien, entablar una relación personal de canon... exige un sacrificio personal que puede llevar desde la locura hasta el suicidio.
El alcohol, el tabaco, las drogas, en general, los niños, los adolescentes... todo, gira dentro del oropel fascinante, glamuroso y manipulado de una sociedad lucrativa para unos cuantos individuos con la cartera repleta y sin escrúpulos.

Ángel Manuel Silva Ruiz

Anónimo dijo...

Buen día a tod@s.
A mí la película me ha resultado sumamente desagradable. De hecho, salí de la proyección rezando para tener un hijo y no una hija. Yo he visto cierta dejadez tanto en los profesores como, y lo que es más preocupante, en la madre, que trata a la hija como una colega. El papel de la madre me ha parecido sumamente interesante y refleja una situación bastante común (por desgracia): el de la figura de los padres ausentes.
¿No os ha pasado de ver un cambio tan grande en un alumno y cuando se lo has comentado a los padres, ellos han pasado? A nosotros nos pasó con una chica que quería ser modelo y adelgazaba a pasos agigantados... La madre lo atribuyó al estirón de la adolescencia.Una pena. Y en cierto modo, he podido ver a esa madre, desorientada, sin educación ni madurez en el papel de Holly Hunter.
Un saludo y buen fin de semana.
Blanca I. Martín Cortés

Anónimo dijo...

Tracy vive en una familia desestructurada, en un hogar donde reina el desorden, con un padre "desaparecido" y una madre insegura e incapaz de controlar su propia vida y, mucho menos, con capacidad para ayudar a sus hijos a orientar las suyas.

Ser buena estudiante y niña modelo es, desafortunadamente, muy impopular. Así pues, Tracy se deja manipular por Evie, una "amiga" con demasiadas experiencias negativas para su edad, que la introduce en un mundo de drogas, alcohol,...

Cada uno de los temas que toca la película podemos verlos reflejados en nuestra sociedad, ya sea en el entorno escolar, familiar,... pero todos juntos me resulta exagerado:
desestructuración familiar, anorexia, drogas y alcohol, autolesión, permisividad, poca implicación del profesorado, amigos manipuladores y destructivos, ignorancia de las familias sobre los círculos donde se mueven sus hijos...
Supongo que una cosa va llevando a las otras, pero no parece muy real.

La verdad, no acabó de gustarme la película, hubo momentos que sentí mucha angustia.
Mª Coronada Corral Robles

Anónimo dijo...

A mi no me ha gustado la película. No soy experta en cine, pero el tema que trata me parece un topicazo: chica empollona que para ser la "guay" del instituto se echa a perder. Incluso creo que se aprovechan de escenas duras para intentar darle un toque diferente a la película.
A pesar de esto, decir que la protagonista vive en una familia totalmente desestructurada, y que lo único que trata de hacer es llamar la atención de sus padres. Se diría que está falta de cariño y que esa es la causa que le lleva a cambiar de raíz el enfoque de su vida. Se pueden extraer muchas conclusiones y hacer muchos análisis de la película, aun así me parece un caso extremo. Aunque quizás esa sea la intención, poner un caso drástico para llamar la atención del que lo ve y advertir de forma clara de los peligros que acechan a un adolescente.

Ana Ramírez Bernabé

Anónimo dijo...

"Las terribles consecuencias que la falta de apoyos familiares pueden tener en las vidas tan delicadas de los adolescentes". Así podíamos resumir el panorama que nos presenta esta película, en la que una adolescente que no encuentra asideros en su familia, los busca en un "ser ideal" que es su amiga.
Tenemos un padre irresponsable, incapaz de ocuparse de la vida de su hija.
La incuestionable buena intención de la madre, queda anulada por su desequilibrio que la incapacita para atender a tiempo a las alertas.
Pero siempre hay esperanza para las personas, y la película nos deja creer en elo.
M. Ángeles Martín Manso.

cazorla dijo...

La primera pate de “Thirteen” es un claro reflejo de la inseguridad y complejos de una adolescente, representa su ruptura con su vida anterior,su niñez, y su personalidad aún por formar.
La protagonista es vulnerable a las críticas de los demás, a la moda y la publicidad. Analiza la forma de vestir, comportarse, moverse y relacionarse, de la persona que toma como modelo de su nuevo Yo.
Siente una radiante felicidad cuando se ve aceptada, pero también significa la ruptura con todo lo que antes era: sus responsabilidades, su relación con la familia y sus antiguas amistades.
Sinceramente la película ma ha decepcionado bastante. No dudo de su calidad cinematográfica, sus tonos de luz acordes con la trama, el simbolismo del cartel, que va deteriorándose a la vez que la vida de los personajes, la música y ritmo; pero mis conocimientos sobre el 7º arte son muy reducidos y creo que el carácter de este curso es más pedagógico que cineasta.
Centrándome exclusivamente en el argumento de la película, y pese a saber que se me clasificará de ingenua, me ha parecido exagerada: la situación familiar, con una madre con problemas de autoestima y en terapia,su pareja, drogadicta, un padre que no mantiene relación con sus hijos ni se preocupa por ellos, una casa que es un auténtico desatre, donde además de los innumerables problemas familiares se les suma los de otros; y la personal , ya que el personaje principal tiene una autoetima muy deteriorada,con innumerables complejos que “resuelve” imitando a su a “amiga”, desembocando en drogas, sexo, autoagresión y problemas alimenticios.Y para terminar y rizar el rizo, su “modelo” a imitar es una niña de 13 años que es el auténtico demonio, sumida en un mundo personal y familiar igual o más caótico que el de nuestra protagonista.
Indicar que no me consuela nada el final: una madre abrazada a su hija, estando junto a ella en los peores momentos, consolándola, apoyándola... pero repitiendo el papel durante todo el film. Estar al lado de quien lo pasa mal y tiene dificultades (amiga, pareja...)pero sin resolver nada, sin dar ningún paso.
Señalar la posición idéntica de ambas tutoras: echar la culpa a las amistades y así de paso quitársela a sus hijas. Es algo que los padres han hecho siempre, pero en estos dias que vivimos, más. Es una práctica habitual la de proteger al menor y creer que él nunca cometería
ninguna falta.Los maestros en la escuela lo vivimos a diario y desde las etapas más tempranas, así cuando se le castiga , él nunca tiene la “culpa”. Los padres o tutores, frecuentemente cuestionan el criterio del adulto incluso delante del alumno, lo que implica quitarnos la autoridad.
Me llama la atención que en el centro donde estudia, a nadie el sorprenden los cambios radicales de una adolescente que hasta el momento ha sido una niña responsable. No se trata sólo de un cambio achacable a la edad: su cambio físico, de amistades, de comportamiento, su desinterés por los estudios, su repentina rebeldía... ¿No debría haberlo detectado algún profesor y haber intervenido de alguna forma que vaya más allá de informar sobre la repetición de curso?
Por último, estoy totalmente de acuerdo que es una película no apta para adolescentes, pues podrían interpretarla de frma contraria a la pretendida, resultando atraídos por el desbordante mundo que muestra.
Eva Morales Jiménez

Anónimo dijo...

Thirteen es una película que ahonda en la problemática de los adolescentes. Para ello analiza en profundidad la vida de dos chicas con sendos problemas de identidad.

Impactante la gran transformación de Tracy, que pierde su inocencia por la influencia de Evie, chica popular en el instituto que la introduce en el mundo de las drogas, sexo y violencia. Evie, manipuladora y destructiva.

Familia desestructurada. Madre alcohólica e insegura que no sabe decir no a su hija. Sin una figura paterna en la que se sienta segura y querida. Falta de comunicación en las relaciones padres-hijos.

Visionando esta película nos muestra también las inseguridades, angustias, frustaciones, crisis... de la adolescencia.

Película que no nos deja indiferente.
Mª Elisa Sánchez Piris.

Anónimo dijo...

Quería comentar que esta película me ha parecido dura y cruel, teniendo en cuenta que estamos ante la representación del comportamiento sin valores de niñas de tan sólo 13 años, que tratan de consumirlo todo, como bien se dijo al principio de la película, desde las drogas, el sexo, la ropa hasta a ellas mismas.
Me llamó también la atención el papel de la familia, sobre todo de la madre que intenta por la vía de "las buenas" atajar sin éxito la situación, consiguiendo con ello empeorar las cosas.
Me hubiera gustado tal vez que la película mostrara un poco más de la vida de ambas en el instituto.
También debo decir que no considero que sea una película para mostrarsela a los alumnos, más que nada por no dar ejemplos aconsejables.
Un saludo y nos vemos en la próxima película, que espero sea más alegre que esta!

Anónimo dijo...

He realizado ya alguna aportación sobre esta película, que para mí ha sido de las más duras que he visto con respecto a adolescentes y a la cual no considero, en manera alguna, un ejemplo de película para mostrársela a los adolescentes, más que nada porque podría mostrar modelos de conducta o sentirse identificados.
Sólo quería aportar un dato más:de esta película es aprovechable mostrar a los adolescentes la importancia de tener iniciativa propia y no dejarse llevar por los demás, aunque eso suponga subir en popularidad y autoestima.
Sin más, un saludo y nos vemos en la próxima película.
Isabel Venegas Torvisco
I.E.S. San Roque

Anónimo dijo...

la película muestra cómo la adolescencia es una etapa clave en la configuración de la personalidad y los modelos, sobre todo la pertenencia a un grupo es clave en la trayectoria vital de una persona. Así, la protagonista se ha planteado un modelo a seguir en su amiga y está dispuesta a todo ,a saltarse todoas las reglas.
Creo que la madre juega a ser amiga y colega de la hija, no traza una línea de educación clara y definida lo que hace que su hija esté aún más perdida en ese momento en que todos trazamos lo que va ser nuestra personalidad y las líneas básicas de la vida.
Resecto al personaje diabólico de la amiga, yo no creo que evolucione a lo largo de la película sino que es un ejemplo extremo de manipulación de los demás para la obtención del propio beneficio.
Montaña Rojo

Anónimo dijo...

De la pelicula me parecio impactante la transformación que sufre la chica en gran parte por la mala influencia de la amiga, aunque la raiz del problema podria estar en la insuficiente autioestima: falta de educacion emocional y sobre todo en la inadecuada conducta de la madre que asume un papel muy distinto al que le corresponderia.
En general me parecio que desarrolla una historia que se puede dar con relativa frecuencia,ante la que solo cabe pensar el modo de educar para afrontar una etapa muy delicada y dificil. Lo que no me parecio tan creible fue la manera de resolverlo y el final feliz tan repentino.
Aunque me resulto bastante menos agradeble que la anterior, el tema me parecio muy interesante e inquietante.
Yolanda Carrasco.

Anónimo dijo...

El terminar de ver esta proyección supuso para mí un gran esfuerzo por las escenas tan cruentas que contiene y que ya nos advirtieron los presentadores de la misma.
Magnífica la actuación de los personajes femeninos que nos desvelan una realidad social: la dificultad que tenemos los padres para educar a nuestros hijos adolescentes. Este problema se agudiza evidentemente si se resquebrajan los pilares familiares: padres separados. Pero aún más se puede enfatizar el caso si la madre, única educadora de sus hijos, es una mujer de carácter frágil, que pasa por una situación traumática como es el divorcio.
En este ambiente tambaleante de carencia afectiva y educativa de un padre con el que dialogar y preguntar las dudas y temores que acompañan a cualquier adolescente, surge el mundo fantástico y fácil de una chica que encuentra un escapismo a esa falta de cariño paternal y las respuestas que no halla en el mundo fácil y materialista que le presenta su amiga: droga, sexo y alcohol. Pero Tracy se ahoga, naufraga en ese peligroso submundo en el que no encuentra salida a sus problemas. Se siente además, culpable de la falta de entendimiento con sus madre, de la situación económica y afectiva por la que atraviesan todos los miembros de la familia: una madre demasiado permisiva, que necesita el cariño de un hombre que ha perdido y desea mantener, por encima de todo, su juventud. Tracy, sólo encuentra alivio en su interior cuando se refugia en el baño y se autoflagela haciéndose pequeños cortes con una cuchilla en su brazo izquierdo.
Como enseñante creo que esta historia nos presenta entre otras muchas cosas, el comprender la importancia que tiene la carencia de comprensión y de valores que algunos alumnos pueden mostrar a estas edades y la problemática que a veces se esconde detrás de un comportamiento rebelde y un fracaso escolar.
La familia; evidentemente, es el pilar en el que se asienta el equilibrio psíquico y emocional de cualquier adolescente. Los profesores tenemos la obligación de reforzar esos valores éticos para el buen desarrollo intelectual de nuestros alumnos.

Anónimo dijo...

La vida de la muchacha protagonista se acerca al prototipo de cualquier joven que busca su identidad en la epoca más complicada de todo a nuestra existencia.
Pofr una parte aparece la influencia de las amistades que sobresalen no precisamente por ser modelo de buenas virtudes y valores, por otra el repetido caso de familias separadas en el que cada uno vive su vida y no se preocupa adecuadamente de la educación de sus y hijos y por otra se encuentra el sistema educativo que, en resumidas cuentas debe hacerse cargo de la educación integral de cada alumno a nivel personal y a nivel global y en cada uno de los estatus por los que van pasando nuestro alumnos.
Los acontecimientos van llenando de oscuridad todo lo que toca y poco a poco se va complicando cada vez más y con menos posibilidad de salir del agujero negro en el que nuestra protagonista se encuentra inmerso, pero...
Primero: el hecho de forzar la situación hasta el punto crítico hace que se definan las posturas de cada uno de los jóvenes que participan en esta faceta del momento.
Segundo: la actuaciaón del sistema educativo hace que la protagosnista tome la decisión más adecuada sin sentirse forzada a llevarla a cabo sino poniendo a punto su más preciado tesoro,su libertad.
Tercero: la aparente debilidad y falta de autoridad de la madre de nuestra joven de 13 años se complementa por su cariño y perseverancia el cual constituye para ella un punto de referencia y un faro en esa tenebrosa y agitada oscuridad.
Se observa que en mayor o menor medida esta historia se repite cada curso cvon algunos de nuestros alumnos no quizas a esta temprana edad ni tam poco con tanto dramatismo pero sí en cuanto al modelo de compotamiento. Nuestra actuación puede ser muy importante y, a veces sin saberlo, nuestra forma de atender a nuestros alunmnos y de ayudarles en sus problemas puede ser decisivo.
Antonio Pérez Ortiz

Anónimo dijo...

De las tres películas que hemos visto, sin duda es la más dura en el fondo y en la forma.
Algunas "actitudes" de los personajes, me revolvieron en el asiento, así, el trato agresivo de Tracy hacia su madre, el pasotismo del padre que se desentiende de sus obligaciones alegando un trabajo con el que cubrir las necesidades económicas, que no afectivas, de sus hijos, la obsesión por conservar la juventud y la belleza de la tutora de Evie y, como no, el consumismo de todo tipo de Tracy y Evie que les hacer caer en lo más bajo.
El origen de todo esta situación es la "no educación". Como el "feliz no cumpleaños " de Alicia en el país de las maravillas,la película es la fiesta de la "no educación".La madre, permite casi todo a sus hijos, ocupada en estabilizar su propia vida y sobrevivir en el día a dia hasta que el problema le "estalla encima".
El padre no tiene tiempo para sus hijos que crecen sin su apoyo, sin normas,sin disciplina.Tanto la casa como las relaciones familiares son caóticas desde el principio.
Los profesores que actúan como meros espectadores de los cambios que se producen en su alumna.
La tutora de Evie que ni siquiera sabe como vive su sobrina, entretenida en mirarse a sí misma.
Para mí, hay dos personajes que se van formando a lo largo de la historia y que se cruzan continuamente.
Por un lado se nos presenta Tracy que irrumpe en la adolescencia con la fuerza y la impaciencia propias de la juventud, que no vacila en convertirse en alguien diferente para no sentirse sola y ser aceptada por el "grupo". En el proceso de cambio, no duda en aceptar todo lo que se le ofrece
( moda, sexo, drogas,consumismo, mentiras absentismo escolar..).
En el otro lado aparece su Madre que vive en ese mundo doméstico de las pequeñas cosas(trabajo, casa,novio, hijos, pastillas...), percibe los cambios de su hija, pero no sabe o no se atreve a enfrentarse cara a cara con la realidad (acepta la convivencia perniciosa con Evie, la entrada y salida de su novio,la llegada de amigas con sus hijos)no sabe decir "No", a veces esta actitud me resulta un poco irritante.
Madre e Hija, se van cruzando a lo largo de la película a base de enfrentamientos, sólo al final se unen para buscar una solución.

La historia nos sumerge en el difícil mundo de los adolecentes, de sus relaciones, sus necesidades, sus inquietudes..y me pregunto si los adultos que los rodeamos, en nuestro caso como "enseñantes", sabemos ver lo que les ocurre y estar a la altura de las circunstancias par echarles un "cable".
No deja indiferente a nadie
Firmado: Mª Jesús Penco Martín

Anónimo dijo...

La película es bastante más dura que las anteriores, ya que refleja como una chica responsable(Tracy) y con comportamiento ejemplar se transforma en pocos meses en una joven conflictiva que consume drogas,se lleva mal con su familia...
Los factores que llevan a esta situación son varios:
Por un lado Tracy quiere ser popular y las chicas responsables que sacan buenas notas no son precisamente muy populares. La lider del instituro, Evie Zamora, decide hacerse su "amiga" aunque lo unico que pretende es utilizarla y causarle daño, induciendola a vender y consumir drogas, pequeños robos, conflictos en su familia... Pero aunque pierde en todos estos aspectos, Tracy gana popularidad y merecen la pena el resto de daños colaterales. Incluso los intentos de suicidio que manifiestan que Tracy nunca es féliz en su nueva vida.
Por otro lado, la madre de Tracy ve como su hija se trasforma pero en lugar de ponerle limites decide apoyarla, esta mujer necesita agradar siempre a todo el mundo y no sabe decir no, así decide convertirse en la amiga de su hija olvidando su papel de madre, y cuando se da cuenta que la situación se escapa de sus manos ya es demasiado tarde y no se ha ganado el respeto de su hija y por lo tanto no consigue frenarla. Esto es algo parecido a lo que puede pasarnos en el aula, si desde el principio de curso queremos agradar a nuestros alumnos y caerles bien, ellos nos tratarán como a un amigo, con las faltas de respeto y pérdida de autoridad que esto implica.
Cuando Tracy se da cuenta de que no le gusta su nueva vida, es difícil salir de ella, además se refugia en Evie que sólo pretende causarle todo el daño posible,. Cuando Tracy saca a Evie de su vida y busca el apoyo en su madre, es cuando tiene posibilidades de recuperar su vida.
Inmaculada Casimiro Manzano

Anónimo dijo...

´La película es muy dura y a pesar de las advertencias hubo momentos de esconderse en el sillón.
Es una película detallista y minuciosa. El guión da un buen repaso a la sociedad de la abundancia y del consumismo, de la búsqueda de lo felicidad propia y nada más:
En primer lugar hay una extrema permisividad en la libertad de los adolescentes que en realidad esconde abandono y dejadez. La madre siempre está posponiendo el hablar con la hija.
Por otro, está la ignorancia o despreocupación de los padres (disfrazado de interés porque coma bien, vista bien y se porte bien) hacia la hija por estar enfrascados en ganar dinero para vivir mejor o en rehacer relaciones para vivir acompañados en ese mundo de soledades. El padre no tiene tiempo nada más que para el trabajo.
Por último el deseo de experimentar rápidamente a los 13 años (a veces se te olvida que esa es la edad de la niña), lo que la lleva a la autodestrucción.
Tracy es una víctima de su familia y de la sociedad en la que vive. En realidad lo único que demanda es cariño, atención, ser escuchada, acompañada por sus padres y amigos y ser respetada por ser Tracy, una niña de 13 años.
Saludos. Pilar Merino Tinoco

Anónimo dijo...

Por lo visto desconocemos hasta qué punto estamos al márgen de la realidad adolescente, de sus costumbres, de las situaciones que viven, de la necesidad de pertenecer a un grupo determinado,...; de ser aceptado. En general en la película se muestran los estereotipos de los problemas que viven los muchachos; y la falta de referencias a nivel de ideas,... ¡todo es material!... Y claro, la necesidad de afecto y comunicación entre las personas.

Anónimo dijo...

Thirteen nos presenta a Tracy,una chica preadolescente que vive con una madre separada, que no encuentra el cariño,amor y apoyo que necesita en sus padres y,lo busca, en el entorno que le rodea.Se ve manipulada por la lider popular del instituto, Evie,que la arrastra al mundo de las drogas, sexo y violencia.

Tracy es una chica sencilla, sana, buena estudiante e infantil, que es justo lo más impopular que una adolescente puede ser para ser aceptada e integrada en un grupo de chicos modernos y guays.Descubre a Evie y queda fascinada, pretendiendo imitarla.Por ello cambia su comportamiento habitual evitando responsabilidades, rompiendo la relación con su familia y antiguos amigos, comenzando a beber, drogarse y autolesionarse.Todo ello lo hace sin control y se le escapa de las manos, sintiéndose culpable porque sigue sin encontrar solución a su problema.

La madre no le da el apoyo y cariño que necesita, y no se da cuenta que su hija tiene problemas, aún viéndola borracha.
Es una mujer débil,insegura,con ciertos comportamientos infantiles (quiere ser colega de su hija, vestir como ella y mantener su juventud). No es capaz de controlar su propia vida ni orientar la de sus hijos. Es también muy permisiva con ellos. La relación entre ellas, que al início de la película era de cierta intimidad,se va deteriorando, pues Tracy se vuelve violenta, le insulta y la trata mal.El padre no se ocupa de los problemas de sus hijos.Al final, la madre se da cuenta de que su hija le exige dedicación, cariño y amor.
Esta película nos hace reflexionar sobre la difícil etapa de la adolescencia, la influencia de la sociedad de consumo en nuestros hijos y alumnos, sobre todo, a esa edad en la que la mayoría de los chicos son débiles e inseguros y necesitan nuestros consejos y apoyos.
Manuel Corcobado.

Anónimo dijo...

Película con una temática durísima en la que se pone de manifiesto lo importante que es la educación de los adolescentes, en general, y más particularmente (puesto que nos toca directamente)de nuestros hijos. No se puede adoptar una postura de connivencia o de laxitud con ellos, pues su personalidad no está formada y están expuestos a influencias perniciosas que les pueden llegar a arruinar la vida y, por ende, las nuestras. Aunque se les deje "su espacio", hay que estar sobre ellos, vigilantes y pendientes de cualquier actitud que denote hacia dónde se dirigen. Es crucial concienciarse de que a esas edades los padres no somos ni podemos ser amigos, sino que somos padres y sus educadores y siempre van a ver en nosotros "ese enemigo que les coarta la libertad" pero que vela por su seguridad y bienestar.
Película que te deja muy mal cuerpo pero que deberíamos ver todos los educadores y padres como ejemplo de lo que no se puede hacer. Al fin y al cabo trata de nuestros hijos y ellos son lo más importante.
Un saludo.
María Jesús Sánchez Carrero.

Anónimo dijo...

Película dura aunque recomendable sobre todo para padres. No me extraña que una compañera no pudiera tomar una cerveza cuando acabó la proyección argumentando que tenía una hija de 13 años en casa....
A pesar de algunos comentarios del blog señalando que la película les ha parecido la más floja del ciclo, a mí no me lo ha parecido así, creo que es de obligada visión en las "Escuelas de Padres" que se han formado recientemente en algunos de nuestros centros de secundaria. Algunos padres piensan que sus hijos a los 15-16 años todavía hacen las mismas cosas que realizaban ellos cuando tenían esa edad. Esta película, aunque exagerada, si no fuese así no llamaría la atención, es muy ilustrativa de los peligros que pueden acechar a nuestros adolescentes, y que están ahí, aunque algunos no quieran verlo.
Un saludo.
Francisco Javier García Carrero

Anónimo dijo...

De todas las películas que llevamos vistas ésta es la que menos me ha gustado. supongo que en primer lugar porque éste tipo de temas no me van demasiado ni tampoco el ruido tan estridente que acompaña a la acción en todo momento.
La verdad es que su contenido no me sorpendió demasiado. Casos como estos afortunadamente espero que no sean demasiado frecuentes aunque tampoco me sorprendió la evolución de la niña protagonista. Se demuestra una vez más la vulnerabilidad de la que participan los adolescentes que se dejan influir por el qué dirán y por malas compañías, aunque la madre y el padre tampoco es que pusieran mucho que digamos.

Anónimo dijo...

De todas las películas que llevamos vistas ésta es la que menos me ha gustado. supongo que en primer lugar porque éste tipo de temas no me van demasiado ni tampoco el ruido tan estridente que acompaña a la acción en todo momento.
La verdad es que su contenido no me sorpendió demasiado. Casos como estos afortunadamente espero que no sean demasiado frecuentes aunque tampoco me sorprendió la evolución de la niña protagonista. Se demuestra una vez más la vulnerabilidad de la que participan los adolescentes que se dejan influir por el qué dirán y por malas compañías, aunque la madre y el padre tampoco es que pusieran mucho que digamos.

Anónimo dijo...

De todas las películas que llevamos vistas ésta es la que menos me ha gustado. supongo que en primer lugar porque éste tipo de temas no me van demasiado ni tampoco el ruido tan estridente que acompaña a la acción en todo momento.
La verdad es que su contenido no me sorpendió demasiado. Casos como estos afortunadamente espero que no sean demasiado frecuentes aunque tampoco me sorprendió la evolución de la niña protagonista. Se demuestra una vez más la vulnerabilidad de la que participan los adolescentes que se dejan influir por el qué dirán y por malas compañías, aunque la madre y el padre tampoco es que pusieran mucho que digamos.

Anónimo dijo...

Soy Sara, estudiante de 1º de magisterio (inglés) y “Thirteen” es la primera peli que he venido a ver a este curso.
La primera impresión sobre la película es bastante fuerte. De repente, una chica normal que no es popular empieza a salir con la chica más popular del colegio. Comienza entonces a hacer cosas que antes no hacía y que su madre, si supiese, le prohibiría. La mantiene engañada y hace todo lo que su nueva amiga le dice. Y todo por ser aceptada por esos que todos llaman populares.
Refleja claramente la sociedad en que vivimos. De una forma más extrema o menos, la mayoría de los adolescentes intentan abrirse camino en una sociedad en la que los estereotipos y la moda marcan una cierta tendencia que, en gran parte, ayudan a que ciertos valores morales se echen al olvido. Y es que es mucho más importante cómo se sienta un@ amig@ en un determinado momento que la impresión que le puedes causar a una persona “popular” por llevar tal o cual ropa. Hay una escena que me impactó mucho y que refleja muy bien este hecho: el momento en que están las dos chicas sentadas sobre la hierba y viene una antigua amiga, entonces ellas se van para que no las vean con ella, porque “ella no es popular”. Este me parece que es el tema que yo más destacaría de la película.
Pero también aparece el tema de la consumición de sustancias (drogas, alcohol, tabaco). En realidad, está relacionado con el tema anterior: muchas de las personas adictas resulta que han entrado en ese mundo persiguiendo otros fines: ser el/la más popular, impresionar al chico o a chica que le gusta, parecer más importante,…
¿Cómo luchar contra esto? A mí me parece que la mejor opción es prevenirlo. Siempre se ha dicho que es mejor prevenir que curar, ¿no? Pues bien, una buena educación, información a tiempo sobre esto puede evitar, al menos en algunos casos, estas situaciones. La familia es la primera que debe dar ejemplo y una educación adecuada para la vida. Es lo que llamamos socialización primaria. Y es que los primeros años de vida son importantísimos. Pero la escuela también es importante. Desde la escuela (socialización secundaria) se les deben enseñar valores, esos valores que parece que se van perdiendo en la sociedad, esos valores que a lo mejor ya deberían de haber sido enseñados por los padres.
De cualquier manera, desde la escuela se deben fomentar todos esos valores; y los maestros debemos contribuir a ello; que conformarán la moral, los prejuicios y los principios acuerdo a los cuales actuará el niño y posteriormente el adolescente y adulto en un futuro no muy lejano.

nombre: Sara Flores González

Anónimo dijo...

Frente a la opinión expresada por no pocos compañeros, a mí sí me ha gustado mucho la película y me parece muy pertinente su proyección en este ciclo de cine, que aborda los problemas de la educación y la familia.
Por otra parte, desde un punto de vista técnico, se trata de una buena película, ya que, como suele decirse, en el buen arte la forma siempre debe apoyar al contenido; en este sentido, y para no ser prolijo en el comentario, destacaré cómo la banda sonora le imprime un ritmo caótico y trepidante en los momentos que se requiere.
Tracy se enfrenta a su adolescencia con una absoluta desorientación, ella emite algunas señales y pide ayuda a su manera, pero su entorno familiar no es el más idóneo para descifrar sus mensajes. El poema, estupendo por cierto, que le recita a su madre es un indicio de que el mundo que le había sostenido hasta entonces comienza a desmoronarse. Ella siente necesidad de anclaje y busca ayuda en la persona que más la quiere y que está más próxima a ella: su madre; pero ésta se da cuenta de que su hija comienza a hablar un "idioma" que ella ya no entiende del todo y siente pavor a plantarle cara a un problema que sabe que la supera en esos momentos y la adolescente no encuentra el apoyo familiar que necesita. En resumidas cuentas, la madre es un personaje desequilibrado que está siempre "ahí", pero sin demasiado éxito, siendo sus intervenciones en no pocos casos desafortunadas, ya que ella también siente un gran vacío en su interior. El novio de la madre y el hermano de Tracy son dos personajes que tratan de ayudar en la medida que pueden, pero sin saber tampoco muy bien cómo hacerlo. Y no hemos de olvidar en absoluto al padre de Tracy; su breve intervención es magistral, con qué pocas pinceladas se dibuja perfectamente a esta especie de tiparracos...
A todo ello se une el personaje de Evie y el cóctel ya resulta altamente explosivo. Tracy comienza su peculiar bajada a los infiernos de la autodestrucción. Al principio incluso resulta divertido para ella, pues se aferra con todas sus fuerzas a un mundo que hasta entonces desconocía; pero la cosa va cambiando a medida que avanza la proyección y en la escena nueve resulta sobrecogedor apreciar cómo ella ya no se reconoce ante el espejo. Afortunadamente, la madre descubre a tiempo las autolesiones físicas y morales de su hija y al final juntas emprenden el camino de vuelta...

SIXTO GALÁN MELO

Anónimo dijo...

NO quiero dejar pasar la ocasión para felicitar a los promotores, administradores (o lo que sean) de este curso y de esta página que me parece llena de contenidos muy apetitosos para todos los docentes aunque no tengamos todo el tiempo necesario para aprovecharlos como se debiera.
La película Thirteen me ha gustado menos que las otras que hemos visto en el ciclo, ya que es quizá la menos sorprendente. Puede que ya nos sepamos la historia porque se ha repetido bastante a nuestro alrededor.
A menudo nos sorprendemos, para bien o para mal,de lo rápido que cambian nuestros adolescentes-alumnos que de julio a septiembre son personas casi diferentes. Y esto se ve reflejado muy bien en la película.
Un adolescente puede que sea el ser más vulnerable dentro de una familia, sociedad, etc. Y para bien o para mal, los cambios, las actitudes de alrededor le afectan en una medida que los adultos ya hemos olvidado.
En la película todos los cambios que experimenta la protagonista vienen dados, no solo por la mala influencia de su "amiga" Evie, sino por la incapacidad pasmosa de la madre que no reacciona ni pronto ni tarde ante lo que es evidente desde el primer momento en la película.
Cuando La protagonista recita su poema a su madre, se muestra la necesidad que tiene de comunicar o de abrirse al exterior, quizá con otro lenguaje: el suyo propio. Lenguaje que su madre no entiende ni se preocupa por entender.
La actitud de esta madre pasota hasta decir basta la verdad es que es poco creíble.
Creo más bien, que es la protagonista la que utiliza a su amiga también para llamar la atención de su madre, de los adultos, de alguien que la pueda comprender.
El hecho de no conocer lo que son las normas y los límites, porque su madre tampoco se los ha enseñado, hace que esas llamadas de atención también se le vayan de las manos.
Elena Blázquez Durán

Anónimo dijo...

La película es muy dura. Es difícil de asumir que alguien eliga la autodestrucción delante de nosotros y sin enterarnos.
Los profesores no vemos ni una pequeña parte de lo les sucede a nuestros alumnos, pero menos ven los padres. Los padres comentan a los tutores cosas como "mi hija/o me lo cuenta todo"; y otras veces se sorprenden de lo que han hecho sus hijos en el instituto y te dicen "es que no me puedo creer que me esté hablando de mi hijo/a. Mi hijo no es así".
En la libertad de poder elegir, está presente también la posibilidad de equivocarte (sobre todo si tienes 13 años)
Isabel Miguel

Anónimo dijo...

Hola! En primer lugar me gustaria señalar que la pelicula me ha impactado mucho, por un lado me ha gustado bastante pero tambien he de decir que hay escenas un poco desagradables. El papel de la protagonista es fundamental ya que muchos de los adolescentes que entran por primera vez en el instituto cambian de repente para gustar a los demas haciendo cualquier cosa, dejando de un lado a sus amigos del colegio, desobedeciendo las normas de casa, empiezan a tener malos resultados academicos... en fin, son muchos los cambios repentinos que se producen en los adolescentes al entrar en el instituto ya que la aprobacion social es el primer reto que quieren conseguir y lo hacen a cualquier precio. En la pelicula tambien es importante el papel de la madre, y todo por lo que estaba pasando, es una mujer que tiende a asumir las responsabilidades de todo el mundo, cargandose de problemas e intentando solucionarle la vida a todo el mundo, por eso lo pasa tan mal y no deja de tener problemas a lo largo de la pelicula. La amiga de la protagonista realmente pasa tambien por una situacion personal nefacta para este momento tan importante de su vida, solo tiene de referencia a su tia y si habeis visto la peliculam acordaros de como y que hace la tia y si es o no un ejemplo a seguir. En definitiva, la pelicula marca un hecho que aunque en la mayoria de los adolescentes no se lleve tanto a los extremos que te lleva la pelicula si es cierto que ocurre con cierta frecuencia en la actualidad, esto nos ayuda tambien a saber que sienten y porque hacen estas cosas nuestros alumnos o hijos, hace que empaticemos y veamos que en ocasiones hacen cosas por experimentar de las cuales ellos mismo se arrepienten despues. personalmente he de decir que la pelicula me ha gustado bastante porque refleja claramente la realidad por la que estan pasando los niños-adolescentes que hay a nuestro alrededor. un saludo

JOSE CAYETANO DEL HOYO MOLINA

Anónimo dijo...

La película me parece un magníco retrato de una problática actual que podemos encontrar en nuestras aulas. Consecuencia de ese tránsito de la infancia a la edad adulta, los adolescentes necesitan un referente claro y firme sobre el que asentarse y del que carecen las protagonistas de la historia. El éxito fácil fundamentado en lo superficial, el sexo y las drogas hacen de estas adolescentes entrar en una espiral de la que es dificil salir. Se nos señala la importancia del papel de la familia en esta etapa tan dificil,una excesiva permisvidad propiciada por la inseguridad de la madre y de la tía de las protagonistas son las causantes del fatal desenlace. Ya en en la primera película tratamos el caso de la sobreprotección,ahora hemos visto su contrapartida.

José Luis Galeano Martíanez

Anónimo dijo...

La película nos muestra un problema repetidamente llevado a la pantalla, el de la adolescencia, y que no podía faltar en un curso de cine y educación.
las malas compañías, la droga, el sexo mal entendido, el abandono de los estudios, la total y absoluta necesidad de ser aceptados, son los peligros que acechan a los niños en su paso a la adolescencia.Una familia desectructurada y una madre permisiva aparecen en la película como los desdencadenantes de la tragedia. Sin embargo sabemos que este problema se da en otras muchas situaciones familiares, que son muchas las variables que precipitan a un adolescente a este camino de autodestucción y que no existe una fórmula que nos garantice la formación de hijos fuertes y seguros,inmunes a estos peligros. Si es cierto que hay muchos indicios que la madre no sabe detectar y una falta de comunicación con sus profesores que habría sido también necesaria. Sinceramente, la película no me ha gustado como tal , pero reconozco que da pie a un largo debate. Me agrada el final esperanzador, en el que la ternura y el amor incondicional de la madre son el salvavidas para la hija.
Ana Andaluz Carmona

Anónimo dijo...

La película me desagradó como lo hace un día de invierno, uno de esos que nace para destemplar el ánimo y entumecer el cuerpo.
Tracy asume demasiado pronto la responsabilidad de tener que cuidar de su madre adolescente, ciega ante el abismo en que está la niña, incluso mucho antes de que en su vida aparezca la malévola reina de la belleza, la encantadora de serpientes que resulta ser Avy, pese al grito silencioso que desde los versos adolescentes expresa.
Tracy está sola desde el principio por la falta de compromiso paterno,del caos que la rodea.
La angustia que como espectadores sentimos al ver a las dos niñas adentrarse en le infierno de las drogas que las concuce hasta la enajenación más terrible y profunda, es la misma que se siente al estar asomado a la ventana para ver como un alguien se aproxima sin remedio hasta que en una via elegida al azar, el tren siega su vida.
Al final madre e hija abren los ojos , se conocen o se reconocen en lo que son: madre e hija
Después llega el abrazo fetal y el final de la pesadilla.
Felicito y agradezco a los tutores esta iniciativa y todo el trabajo que realizan. esto sí es cine y educación.
Rosa Rodiño

Unknown dijo...

Película dura, pero muy interesante. A pesar de las recomendaciones que nos hicieron los “Ramones” que no era una película para adolescentes, pienso que si se puede ver con algún grupo de alumnos. Me parece que aborda temas que se podrían tratar perfectamente con ellos:
•La influencia negativa de amigos.
•El dejarse llevar por las circunstancias, las modas, el consumismo…
•El pertenecer a una familia desestructurada, sin referente de padre, y una madre que juega a ser amiga de su hija.
•El no tener una personalidad definida.
•El egoísmo adolescente.
•El querer destacar por algo, ser protagonista…
Quizás lo que más me ha llamado la atención de la película haya sido la historia de la madre, más que la propia historia de Tracy. Mujer frágil, débil, herida profundamente por las circunstancias especiales que le han tocado vivir. Ella vive en su mundo “ideal”, sin más complicaciones, en su día a día cotidiano. Apenas se da cuenta de lo que ocurre a su alrededor, incluso no ve lo que comienza a suceder en su propia casa… Cuando percibe que pasa algo extraño, es incapaz de actuar, ha perdido toda autoridad, si es que alguna vez la ha tenido. Se siente desprotegida y acude a su exmarido que, por supuesto, vive de espalda a su hija y sin apenas contacto con ella.
También me llamó la atención que el centro educativo no interviniera, dado el cambio tan brusco que experimentó Tracy, alumna con un buen rendimiento académico y un buen comportamiento, a pasar prácticamente de todo.
Por último quisiera plantear una cuestión ¿le dedicamos el tiempo suficiente a nuestros hijos adolescentes y a nuestros alumnos adolescentes si pensamos que están en una de las etapas más importante de sus vidas? ¿Lo estamos haciendo bien?
Un saludo compañeros.
Mariana Ferrera.

Anónimo dijo...

Impactante y dura película cercana a nuestros alumnos por tratarse de la vida de una adolescente, o más bien de una etapa decisiva de ésta.Vemos cómo una chica de 13 años de buen comportamiento se transforma en drogadicta y anoréxica, se aleja de la confianza de su madre y llega a autolesionarse reiteradamente.Esto lo suele hacer en los momentos de mayor debilidad y confusión; es como una forma de acercarse a su "mundo ideal" y alejarse de la realidad, quizás para intentar suicidarse.
Tracy llega a este punto debido a su afán por integrarse en el grupo de amigas de Envie, la "casi culpable" de todo. Esta chica se introduce en su vida, su casa, su familia a través de todo tipo de mentiras: le hace faltar a clase para ir a conseguir droga,emborracharse, acostarse con el primero que se cruza, robar ropa, dinero,etc. Envie aparentemente es su amiga, pero pone a la madre de Tracy en contra de ella, se enrolla con su novio; en fin, se aprovecha de todo lo que le ofrece la vida de Tracy.
Una vida que, por otro lado no era ideal, ya que la madre de ésta se había separado y se comporta de forma immadura, tratando de hablar y vestir como una adolescente a la que su hija tiene que cuidar a veces. Además, vive con un toxicómano que intenta rehabilitarse sin éxito ante los difíciles acontecimientos en casa de Tracy.
Todo este ambiente descontrolado aparece también en la película, pasando de una escena a otra de forma caótica.
Al final, la protagonista toca fondo, o más bien su amiga Envie le acusa de todo lo que ella misma había hecho para quedar bien ante su madre, ayudado por lo que encuentran en su dormitorio, y acaba dándose cuenta de que todo había sido una mentira.
En definitiva,una película impactante, pero creo que para alumnos con cierta madurez. Me ha gustado, aunque no he podido evitar apartar la mirada en ciertas ocasiones.
Rosa I. Tamurejo Sánchez

Anónimo dijo...

En primer lugar, esta es la única película que ya habia visto de las que están programadas dentro del ciclo, por lo que no me sorprendió, aunque me sirvió para reflexionar algo más sobre ella.
Desde mi punto de vista, nos muestra a una adolescente que lucha por "encajar" y que hará todo lo posible por ser una de las chicas más "populares" de su instituto, sin importarle el tener que transformar todo su mundo para ello.
También podemos adentrarnos en la inseguridad de la edad tan conflictiva de la protagonista, los cambios que se producen en esa etapa de la vida y el peligro de afrontarlos sin un guía en ese camino ni una red firme que te sostenga (como una familia bien estructurada).
Por lo que creo que constituye una critica a la sociedad y una llamada de atención sobre la responsabilidad que la misma tiene sobre la juventud, que está perdiendo valores paulatinamente. Y aunque la película pueda parecernos exagerada, nos muestra lo que tal vez podría llegar a pasar, de forma más generalizada, en un futuro no tan lejano.

Elena López Parejo

Anónimo dijo...

Aunque quizás lo que más llame la atención en eesta película es la representación de las crisis de la adolescencia, quiero destacar la crítica que se hace en ella a la permisivudad como elemento propiciatorio de la evolución negativa de la protagonista. Esta permisividad está reflejada en el personaje de la made, caracterizadfa por la falta de autoridad y por la negación de la realidad. La madre de Tracy, ante el miedo que siente a perder el cariño de su hija, la apoya cuando se percata de los cambios que se comienzan a producir en su conducta: la acompaña de compras, le consiente todos los caprichos (los vaqueros, las salidas, las largas estancias de la amiga en casa...), evita preguntarle sobre ciertos asuntos por no invadir su intimidad, etc. Esto refleja la actitud de algunos padres y educadoreshoy día, marcados por el temor a no agradar y por la falat de autoridad. A mi juicio, el gran problema de Tracy es el de no tener una madre que sepa imponer límites en una edad en la que aún se necesitan. Aunque en la adolescencia los chicos parezcan casia dultos, no debemos olvidar que son personas aún en formación y que por lo tanto, siguen necesitando una guía segura que les ayude a crecer.
Victoria Cobo Peregrina

Anónimo dijo...

Sabía que la película iba a ser dura pues había visto los trailers y cuando llegaban las escenas más duras yo fui una de esos que se tapaban los ojos e imaginaban algo un "pelín" menos cruel.

De todas maneras, no me ha gustado la película, el argumento es muy previsible y no me enganchó nada, ni la música, ni las imágenes, ni las diferentes interpretaciones. Vamos, que no es una película que recomendaría ver y, por supuesto, tampoco la proyectaría en clase; tengo muchas dudas sobre qué verían los ojos de mis alumnos, no sé cómo interpretarían la situación.

Tengo la sensación de que lo que se narra es demasiado alarmista, no pongo en duda que hay situaciones parecidas y aún más horribles pero no hacía falta ponerlo todo tan negro, a veces, dejando ver el problema, sin describirlo con pelos y señales es suficiente, a veces incluso más impactante.

Lo que está bien claro es que debemos cuidar mucho a nuestros adolescente, son muy receptivos y absorven determinadas ideas y costumbres muy perjudiciales para ellos, a la misma vez que son muy esquivos a lo que los adultos podamos aconsejarles

Un saludo. Antonia Pajuelo

Anónimo dijo...

Una pelicula especialmente dura.Me cuesta creer que sea realista, especialmente por la rapidez en la que se da la transformacion de la protagonista.Pero, en todo caso, nos puede servir para comprender la situación en la que se pueden encontrar los adolescentes hoy día.Excelentes interpretaciones de madre e hija.
A.Fatima Rodriguez Garcia

Anónimo dijo...

Tracy, adolescente de 13 años, entra en un ritmo de vida muy frenético, del que le costará mucho salir.
Es una película dura, confusa y caótica.
En ella se mezclan muchos ingredientes: las autolesiones, las drogas , el alcohol,la permisividad de los padres, las malas compañías...que no siempre tienen que estar relacionados con los adolescentes.
En mi opinión, el tema está tratado de forma exagerada.

Un saludo.
Mª del Rosario Marqués Muñoz

Anónimo dijo...

Película de gran dureza, en el trato del paso de una niña que juega con las muñecas y que se enfrenta al reto de querer cambiar, en un espacio muy corto de tiempo y hacerse adolescente, imitando lo que ella piensa que puede hacerle feliz: nuevas amigas, nuevo vestuario, nuevos hábitos... sin darse cuenta que se está metiendo en un pozo. Un madre que intenta sobrevivir manteniendo una familia y que cuando se da cuenta de la realidad en la que se ha metido su hija, ya es demasiado tarde, el problema ya es muy complicado.
La hija se ha dejado llevar por otra "amiga" que simplemente la había utilizado.
La enseñanza de la película es la que de pequeños nos decían nuestros padres "cuidado con las compañías".
Mª del Mar Jiménez Lozano

Anónimo dijo...

Me sentí muy incómoda viendo la película. Tanto por las imágenes tan subidas de tono en muchos aspectos, como por ser testigo de la caída de Tracy y ver cómo podría haberse remediado de existir comunicación.

Otra vez tenemos el tema de una familia rota, de unos padres irresponsables y de una niña perdida que busca afecto a cualquier precio, en quien sea.

El hilo conductor me pareció caótico, pero muy apropiado para la evolución de la vida de la niña y todo lo que estaba sucediendo a la vez en torno a Tracy.Me gustó mucho ese modo narrativo. Y la ultilización del color,muy interesandte y simbólica, degradando hacia la oscuridad.

Se nos cuenta la historia de una niña que cambia sus calcetines, sus libros y sus ositos de peluche por algo que en principio, controlado, no debería de ser tan horrible: piercings, tatuajes, y popularidad . Pero ella no es capaz de controlarlo.Supera en mucho a su modelo Evie al imitar sus comportamientos.Y cuando se da cuenta se siente mal. Pero ya no puede bajarse de la montaña rusa.

Sin embargo, este ideal de chica popular en EEUU me resulta muy exagerado. No creo que en mi pueblo esa chica fuese la líder de nada.Aunque no podemos negar que sucede. Seguro que todos hemos visto algún caso parecido.

Me han resultado muy completos los análisis de la película de Diego Calleja y Carmen García .Poco más se puede añadir.

La familia , una vez más, desestructurada: la madre jugando a ser adolescente y amiga de su hija, (que a veces se ve obligada a asumir este papel ausente), el padre que no quiere problemas y no tiene tiempo, el novio ex-toxicómano y la otra madre, recién operadita de sus orejitas, perdida también en sabe dios qué mundo.Y el hermano, que a pesar de vivir la misma ausencia de afecto y drama familiar, parece más sensato...

La "imagen" está presente en toda la película. La popularidad por la imagen.Y una falta de orden,de madurez y fuerza en los adultos asombrosa.Es ahí cuando empieza esa obsesión por "ser uno mismo".¿Y dónde buscan modelo, si no hay nada aprovechable alrededor?

Los pequeños momentos del instituto son también muy tristes; la imagen que se da del instituto, de los buenos estudiantes, de los profesores.Irónicamente , los profesores, en la mayoría de los casos, son los primeros detectores de irregularidades en los alumnos y los padres los que se niegan a ver.¡No olvidemos que pasamos con ellos casi la mitad de su día!

Y la ausencia de valores, hasta la traición final, cuando Evie esconde todas las drogas en casa de Tracy y su madre les reprocha su falta de dignidad.¡Su pobre hija inocente víctima de la malvada Tracy!

¿Pero cómo se pueden perder los papeles de esa manera? ¿y cómo pueden perderlos tantas personas a la vez?

Aunque me ha gustado la película, no volvería a verla. Es incómoda.Tiene escenas muy duras. Pero sí la recomendaría para algunos padres. Quizá podrían reconocer algunos síntomas, algunos signos de que algo no va bien o ha empezado a cambiar. Y recordar lo importante que es la comunicación.Se acabó cuando Tracy empezó a cerrar la puerta de su cuarto y a prohibir la entrada a su madre, a su habitación....y a su vida.

Por suerte, nos ofrecen un final feliz.A pesar de caer en la oscuridad, hay maneras de salir.

Anónimo dijo...

Película impactante y dura que nos hace reflexionar sobre la situación de muchos de los adolescentes de hoy en día donde malas compañías, drogas,alcohol, autolesiones...marcan la vida de una niña de 13 años que busca ser popular quizas a causa de una baja autoestima causada en parte por una familia desectructurada donde destaca la persimidad de una madre que se niega a afrontar la realidad y que carece de toda autoridad

Anónimo dijo...

Hola a todos:

Estoy inscrito en el curso de este ciclo de cine y, en una linea de debate, voy a tratar de usar los comentarios hechos por los compañeros como eje de los mios propios. Veamos los diferentes puntos a los que quiero aproximarme:

1-LA NARRACIÓN

Con respecto a la narración, Lola a dicho:

la “película difícil de seguir. El hilo argumentativo es algo caótico. Me dio la sensación de que en el montaje de las escenas habían perdido el guión:voy al instituto, ahora estoy con mi madre,luego salgo...no me resultó que hubiese ningún hilo conductor.”;

algo que también suscribe “elsalvador”, cuando afirma:

“la película no tiene fluidez narrativa”.

Bueno, es en parte cierto, la película no tiene una narración ágil, pero si tiene una narración con su típico planteamiento-nudo-desenlace. Lo que ocurre es que el nudo del film se centra en los avatares que sufre la relación de Evie y Tracy, recreándose en las relaciones familiares y experiencias de las dos muchachas. En ese sentido, tiene una narración ”lenta”, aunque no creo para nada que sea caótica la narración o que esté desestructurada. Incluso si alguna vez puede ser así, responde más al espíritu de la película, que trata de dar la sensación de realismo mediante un cierto aire de documental o de vídeo doméstico.

2-¿EXCESO DE RALISMO?

En el foro hay una cierta unanimidad al afirmar que la película es poco realista.

Dice “ElSalvador” que:

“ el tema está tratado de una forma tan exagerada que pierde verosimilitud.”

Pepa Ruiz Casillas afirma igualmente:

“Me resulta bastante exagerada, en su planteamiento. Tracy en 4 meses se convierte en politoxicómana, anoréxica, mangante, se auto lesiona y se convierte en la mas "popular" (para continuar con la jerga americana) del instituto. Evie, demasiado perversa ¿no?, con 13 años camella, manipuladora, maltratada, ninfómana, sin familia, con una tutora que no se interesa en absoluto por ella, que a su vez tiene problemas de autoestima, de alcohol y no se de cuántas cosas más.”

Algo suscrito también por Eva Morales Jiménez:

“Centrándome exclusivamente en el argumento de la película, y pese a saber que se me clasificará de ingenua, me ha parecido exagerada: la situación familiar, con una madre con problemas de autoestima y en terapia,su pareja, drogadicta, un padre que no mantiene relación con sus hijos ni se preocupa por ellos, una casa que es un auténtico desatre, donde además de los innumerables problemas familiares se les suma los de otros; y la personal , ya que el personaje principal tiene una autoetima muy deteriorada,con innumerables complejos que “resuelve” imitando a su a “amiga”, desembocando en drogas, sexo, autoagresión y problemas alimenticios.Y para terminar y rizar el rizo, su “modelo” a imitar es una niña de 13 años que es el auténtico demonio, sumida en un mundo personal y familiar igual o más caótico que el de nuestra protagonista.”

Con todos ellos está de acuerdo Antonia Pajuelo, que afirma que:

“Tengo la sensación de que lo que se narra es demasiado alarmista, no pongo en duda que hay situaciones parecidas y aún más horribles pero no hacía falta ponerlo todo tan negro, a veces, dejando ver el problema, sin describirlo con pelos y señales es suficiente, a veces incluso más impactante.”

Bueno, mi opinión, personal y discutible, por supuesto, es que la película no es tan exagerada como muchos pueden pensar.

Es cierto que la realidad que describe puede sernos en gran medida ajena a la nuestra, pero creo que esto no es achacable a la fantasía del guionista o del director.

Hay una aspecto que no debemos olvidar y que es crucial: la actriz que encarna a Evie (Nikki Reed) escribió el guión junto con la directora, tenía quince años al hacerlo (2003) y muchas de sus experiencias adolescentes fueron volcadas en ese guión.

Es cierto que lo descrito choca en parte con nuestra propia realidad cultural (española, de mundo rural o pequeña ciudad), diferente a la descrita en el film (estadounidense, gran metrópolis).

También podríamos decir que nuestra situación social, es muy diferente de la de los protagonistas del film. En cierto modo vivimos en una burbuja, con situaciones sociales y económicas claramente más favorecidas que las que vemos en la película. Creo que todos podemos presenciar en nuestras aulas casos similares, al menos parcialmente. No creo que sea tan exagerado que una misma adolescente pueda aglutinar anorexia, autolesiones, drogadicción, robo, etc. Al fin y al cabo, todos estos elementos son síntomas de algo más profundo y estructural.

Aun tengo vivo que en mis tres primeros años de docencia (en ámbitos rurales y diferentes centros) encontré casos de varios embarazos no deseados, abusos a una menor por parte de un anciano, varios casos de malos tratos, consumo frecuente de drogas (recuerdo en especial el caso de un alumno que podríamos denominar megapolitoxicómano), un hijo abandonado (literalmente) por sus padres tras una ruptura matrimonial y un segundo matrimonio, etc, etc, etc. Y eso era lo que era capaz de percibir o llegaba a conocer. Imaginaros lo que se escapa a mi conocimiento. Recuerdo un centro en el que se hizo una encuesta sobre las drogas y sobre el 6-7% de chicas menores de 14 años había probado la cocaina. Después leí una encuesta a nivel nacional que corroboraba estos datos. Y todo eso está ocurriendo delante nuestro.

En definitiva, no creo que el film sea exagerado, aunque al estar ambientado en una gran ciudad de EEUU, sí que puede estar algo alejado de nuestra propia realidad, aunque no tanto como pudiera parecer.

3-EL ROL DE LA MADRE

Con respecto al rol que cumple la madre, Mª Jesús Penco Martín nos dice que:

“El origen de todo esta situación es la "no educación". Como el "feliz no cumpleaños " de Alicia en el país de las maravillas,la película es la fiesta de la "no educación".La madre, permite casi todo a sus hijos, ocupada en estabilizar su propia vida y sobrevivir en el día a dia hasta que el problema le "estalla encima".”

Por otro lado, Inmaculada Casimiro Manzano afirma:

“la madre de Tracy ve como su hija se trasforma pero en lugar de ponerle limites decide apoyarla, esta mujer necesita agradar siempre a todo el mundo y no sabe decir no, así decide convertirse en la amiga de su hija olvidando su papel de madre, y cuando se da cuenta que la situación se escapa de sus manos ya es demasiado tarde y no se ha ganado el respeto de su hija y por lo tanto no consigue frenarla.”

Ciertamente, comparto ambas opiniones.

La madre trata de ser en todo momento una igual de su hija, y frecuentemente huye del conflicto con ella, sumergida también como está en sus propios avatares personales.

El padre, desde luego, no hace mucho más por su hija, todo lo contrario. Su vida se vuelca casi exclusivamente en su trabajo, dejando de lado las relaciones con su pequeña. Es algo que aparece con frecuencia tanto en películas como en series de EEUU y que responde a una realidad: un país en el la gente vive solo para el trabajo y las relaciones entre las personas son sacrificadas para conseguir ese objetivo.

Todo ello está llegando en parte a nuestro país, y todos tenemos experiencias de padres que no son capaces de asumir su rol como tales. En gran medida esto puede responder a que en una sociedad de consumo, el consumo lo abarca todo. En esta dinámica, un hijo se convierte en un producto de consumo que muchos “adquieren”y del que se preveen las ventajas pero no los inconvenientes y responsabilidades que conlleva. No se toma conciencia de que educar a un niño es un proceso prolongado, que requiere esfuerzos, sacrificios e incluso conflictos puntuales. Es más, muchas veces, los padres tratan de solventar los conflictos con los hijos de manera igualmente consumista, tratando de comprar cariño o buenas notas con regalos o concesiones a los hijos.

4-EVIE, LA GRAN OLVIDADA

Bueno, sobre Evie, quiero recordar lo que ha dicho Inmaculada Casimiro Manzano:

“La lider del instituro, Evie Zamora, decide hacerse su "amiga" aunque lo unico que pretende es utilizarla y causarle daño, induciendola a vender y consumir drogas, pequeños robos, conflictos en su familia...”

Creo que muchos hemos cometido un pequeño error al ver la película: nos hemos identificado con Tracy como la “buena” que se deja llevar por el mal camino. Evie, “la mala” es, por supuesto, la que arrastra a Tracy por ese mal sendero.

Este planteamiento me parece un poco erróneo, aunque lleva parte de razón. A ver, es cierto que Evie es un personaje manipulador, egoísta y muchas veces cruel. Sin embargo, la película no deja de mostrárnosla como lo que es, una niña de trece años, diabólicamente manipuladora eso si. Pero Evie es a la vez víctima y verdugo. Su situación es literalmente desesperada: nadie la quiere, nadie la educa ... Para ella Tracy es un clavo al que asirse de manera desesperada, un medio por el que lograr una cierta estabilidad emocional, el seno de una familia, el calor de una madre, etc. Es cierto que la familia de Tracy tiene sus dificultades, pero es que la de Evie, sencillamente, no existe. Nadie se preocupa de ella. La niña desaparece y su tutora no se preocupa lo más mínimo; en la nevera de su casa no hay comida, solo cervezas ... Por ello Evie se aferra a la madre de Tracy y trata de integrarse en su familia, a veces incluso suplantando a Tracy en la familia, como ocurre en la escena del desayuno

Si hay una historia trágica en la película creo que es la de Evie. Cuando Tracy le da espalda, Evie se nos revela como abocada al abismo de la marginalidad social.

Sin embargo el personaje es complejo. No es solo víctima, sino también verdugo. El personaje es una especie de “vampiro” psicológico que arrastra a quienes mantienen una estrecha relación con ella. Le pasa a Tracy, pero antes le había pasado a otras. En este sentido es explícita la escena en la que Tracy, tras llegar tarde a clase, cuando le dicen que va a suspender, se marcha a los servicios del instituto. Allí se mira en el espejo, desestabilizada, al borde del precipicio emocional, mientras que al lado suyo aparece una de las antiguas amigas de Evie, que tras distanciarse de ella (Tracy la ha sustituido en el rol de “mejor amiga”), ha vuelto a recuperar estabilidad y vuelve a aprobar en el instituto.

Por último, el personaje de Evie es también vengativo, como puede verse al final. Sin embargo, no creo que este final sea un final feliz, como muchos plantean. Lo es para Tracy, pero no para Evie. El final de la película es como una sentencia, el mazazo de un juez dictando condena para una niña de trece años destinada a ser carne de cañón.

En definitiva, me gusta porque es un personaje que no es blanco, pero tampoco es negro. Hay sombras y matices. Es real en muchos sentidos. Y no podemos olvidar que la cinta está basada en las experiencias personales de la actriz que la interpreta.

5-¿UNA CINTA DESAGRADABLE?

Si, lo es, pero ese es precisamente el gran logro. Hacernos sentir mal, removernos en el asiento, hacer que nos tapemos los ojos, arrastrarnos a las vivencias de los personajes y, finalmente, hacernos cavilar cuanto hay en ella de realidad y cuanto de ficción y todo lo que ello implica.

Andrés García Ruiz

Unknown dijo...

Después del último comentario creo que quedan pocos puntos por discutir de la película.
Para mi también ha sido la que menos me ha gustado, pero sólo por el hecho de su estilo y ritmo tan americano que casi nunca me convencen.
Creo por otra parte que no debemos asustarnos por que se nos muestren realidades que aunque pueden parecer exageradas no son imposibles, aunque siempre resulta más cómodo mirar para otro lado para no sufrir.
Por otro lado no creo que sea una película que se pueda utilizar para trabajar con adolescentes pero si en escuelas de padres o en cursos para profesores.
Un saludo.
María Vicenta Cabalgante Perera

Anónimo dijo...

Película sorprendente que analiza en profundidad la vida de dos chicas con serios problemas de identidad, pero lo que late detrás de todo eso es lo que realmente nos quiere mostrar: la inseguridad de una edad conflictiva, los cambios que en esa etapa de la vida se producen y ell peligro de afrontarlos sin una red que te sostenga y fundamentalmente la forma en que la sociedad de hoy influye decisivamente sobre la creación de una personalidad: el consumismo, la obsesión por el físico, los problemas de familia...
No podemos negar que existen demasiados personajes que son casi recurrentes en el cine americano: el padre que abandona a su familia por su trabajo, la madre que tiene que salir adelante sola con dos hijos a su cargo... Pero detrás de todo eso hay una crítica contra todo el sistema capitalista que subyace a lo largo de la película, un ataque frontal a la sociedad americana y, por extrapolación, a las sociedades occidentales que estan dejando a gran parte de la juventud sin valores y lamentablemente sin futuro.
Mercedes Naranjo

manpimu dijo...

THIRTEEN
Una película sorprendente, que trata con bastante crudeza los aspectos más sórdidos de la adolescencia. Aunque no pude verla el día de la proyección, lo hice en casa tras oír a uno de los organizadores hablar de la polémica que había suscitado, y realmente es comprensible tras verla. Me parece muy interesante la evolución que va sufriendo el personaje de Tracy, con rapidez pero de forma verosímil. Se pone de manifiesto la imposibilidad de mantener por mucho tiempo una doble personalidad contrapuesta: en casa y con los amigos.
Interesante es también la relación madre-hija. Al verla casi al tiempo que “Las mujeres de verdad tienen curvas”, no puedo evitar la comparación, si bien teniendo puntos de partida tan diferentes, que quizá lo único que tengan en común es su escasa idoneidad para el adolescente: la madre joven permisiva y poco controladora de Tracy, frente a la madre mayor, chapada a la antigua y nada comprensiva de Ana
No me atrevería a proyectarla a alumnos de secundaria, ni siquiera de bachillerato pues supongo que no sabrían digerir los múltiples mensajes sobre sexo, drogas, delincuencia o relaciones interpersonales con que golpea el film. Hace unos años sí me atreví, con alumnos de 1º de Bachillerato, a proyectarles una película si cabe más fuerte como es “Trainspotting” y la experiencia sí fue positiva. La diferencia desde mi punto de vista es que en Trainspotting se refleja perfectamente, con mucha más dureza, el sub-mundo al que lleva la droga y que no hay finales felices, ni abiertos (como en Thirteen). Sin querer compararla, obviamente, nuestros alumnos ya tienen suficiente para copiar comportamientos y gracietas de los descerebrados protagonistas de pantomimas televisivas como “Física y Química”, “Los Serrano” o la afortunadamente desaparecida “Al salir de clase”, entre otras prendas. Reconozco que nunca conseguí ver un capítulo de estas series, pero el reflejo del ambiente escolar que presentan es enfermizo.
En síntesis, una película más interesante de lo que esperaba, pero no apta para todos los público

Saludos: Manuel Pimienta Muñiz

Anónimo dijo...

Me interesa la película para tratarla en clase en relación a dos temas:
El primero se refiere a los modelos que gozan de popularidad entre los alumnos. La buena hija, la buena estudiante ve que lo atractivo, lo que resulta popular entre sus compañeros es lo contrario. Los profesores vemos muchas veces como algunos buenos alumnos rompen con las antiguas amistades y comienzan una relación con otras que consideramos que no les vienen bien. ¿Debemos comunicárselo a sus padres?

El segundo tiene que ver con la educación de los hijos.El saber conjugar la autonomía de nuestros hijos, con la vigilancia (creerse las mentiras es muchas veces cómodo)y el saber decir no.

Sé que se dan estos comportamientos en adolescentes de 13 años. Aún así, me siguen sorprendiendo y alarmando. Especialmente significativos el que se produzcan con tal brusquedad, cuestión de unas semanas, y que existan personas que utilicen la inteligencia para la mentira de forma patológica y la instrumentalización de los otros.

El mensaje de la película, sin embargo, es esperanzador: la buenas entre padres-hijos, los buenos modelos educativos desarrollados con anterioridad favorecen que estos episodios sean temporales y todo quede en un "pasajero" deslumbramiento.

Anónimo dijo...

La historia cuenta la transformación que vive Tracy (Evan Rachel Wood), quien empieza la película como una gran estudiante que juega con muñecas. Pero es testigo del que posee Evie Zamora (Nikki Reed), popular, guapísima y “cool”, Evie representa todo lo que de repente Tracy quiere y necesita ser. Al principio Tracy no tiene ninguna esperanza de ser aceptada en la elitista pandilla de Evie. pero Tracy aprende a rehacerse a sí misma, hasta convertirse en el ideal definitivo de una adolescente. Descubre cómo maquillarse, qué ponerse, cómo llevar el pelo, cómo moverse. Averigua las claves de la popularidad, Evie se convierte en su mejor amiga e incluso comienza a llamar la atención de los chicos. Cuanto más se adentra en su prematura etapa adulta, más alto se pone el listón. Pierde la intimidad que tuvo con su madre (Holly Hunter), empieza a hacer novillos y, a pesar del odio atroz que siente hacia el novio de su madre, un antiguo drogadicto llamado Brady, empieza a abusar ella también de las drogas. Tracy tiene trece años y vive un torbellino de emociones en el que todo lo que hace, todo lo que dice, todo lo que quiere, parece ser lo más importante del mundo.
Tecnicamente es una película bastante sencilla. Cabría resaltar que gran parte del film está rodado con planos en primera persona que le dan una dosis extra de realismo y el color y la luz que se van volviendo más oscuros a medida que Tracy avanza en su proceso de autodestrucción para terminar en un plano final muy moña en el que vuelve el color, termina la pesadilla, todos felices, comiendo perdices...
Mi humilde opinión es que la película no tiene fluidez narrativa y además el tema está tratado de una forma tan exagerada que pierde verosimilitud.
En cuanto al aspecto puramente educativo: Nada que no sepamos ya. El mejor alumno del mundo puede ser destruído en cuestión de días por una mala compañía, pero ... y lo bien que se lo van a pasar.

01 febrero, 2008
José Manuel González. Ya lo había publicado bajo el seudónimo ElSalvador

Anónimo dijo...

THIRTEEN (Marisa Gil Burdallo)

Thirteen me pareció una película interesante, en nada parecida a las anteriores del ciclo. Refleja con dureza el difícil tránsito por la adolescencia, que se puede ver aún empeorado si el entorno no acompaña, como es el caso: una referencia familiar inestable, unas amistades nada adecuadas. Me ha impresionado la actuación de las dos protagonistas, que inevitablemente me recuerdan a alguna alumna. A veces parece imposible que algunos de nuestros alumnos lleguen a estos extremos que aparecen en la película, pero realmente la historia me parece bastante verosímil, eso sí, salvando ciertas distancias entre la sociedad americana y la europea.

Anónimo dijo...

Esta pelicula para mí ha sido, por calificarla de al´gun modo ¨la más desagradable¨.La forma que muestra cómo las malas influencias pueden llegar a anular la personalidad de los adolescentes,llevándola en el caso de la protagonista a la autodestrucción.
Pepa Moreno Bayort

Anónimo dijo...

Esta película me oarece riquísima y genial para mi aula, es la que de hecho hemos trabajado. Es una historia real, trata el problema con la droga, el de los lazos y las responsabilidades familiares, los momentos y los grupos de riesgo y cómo puede funcionar el amor, porque, aunque lo haya, el hijo puede no percibirlo y muchos de estos son nuestros alumnos

Maribel Apostua

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